El obispo diocesano, monseñor Adolfo Ramón Canecin, encabezó una procesión que se realizó desde la catedral hasta la costanera de Goya, con la imagen de la Virgen del Rosario, para elevar una plegaria para que baje el nivel del Río Paraná y cesen las inundaciones. Acompañado de sacerdotes y la masiva participación de los feligreses se realizó la celebración de la Santa Misa en la costa del río.
El gesto de fe se inició en la Iglesia Catedral con el rezo del Santo Rosario, que continuo por las calles de la ciudad hasta la costanera local, donde el Obispo Adolfo Canecin presidió la celebración eucarística ante una masiva concurrencia de la feligresía goyana.
Monseñor Adolfo Canecín comenzó su predicación, haciendo referencia a la segunda lectura del oficio dominical, afirmando "miren como nos amó el Padre" es por ello que "también tenemos que quedarnos admirados y asombrados del amor de Dios Padre para cada uno de nosotros" por eso invitó a "cada uno a expresarse ante el Pesebre de Belén: me amó y nació por mí".
"Cuanto crece la valorización de uno mismo, nuestra autoestima, porque nos damos cuenta de que somos amados por Dios de una manera total y la Navidad es una expresión de amor para cada uno de nosotros" reflexionó el Obíspo.
Recomendó "pensemos en nuestros hermanos y acordémonos que Dios le amó y nació por cada ser humano" entonces "apliquemos esto a nuestros hermanos afectados por las inundaciones" al tiempo que reflexionó que "a ellos les va a ser muy difícil aceptar esta verdad porque en estas situaciones algunos a veces hasta quieren dudar del amor de Dios" por eso "acerquémonos a nuestros hermanos que están esta situación difícil y ser apenas un signo del amor de Dios".
"Que lindo es expresarnos en este Año Santo de la Misericordia con las obras de misericordia corporales y espirituales, especialmente con las personas inundadas, recordar siempre, estuve inundado y me ayudaste" dijo el Obispo, porque es "una verdad no teórica sino existencial que tiene que conmovernos hasta las lagrimas" expresó.
Alentó a "descubrir que somos imagen y semejanza de Dios, por eso, somos familias y somos familieros y eso nos brota de nuestra naturaleza humana" y pidió estar "unidos en oración" para que por medio de la Virgen "Dios tenga misericordia de nosotros".
Como ofrenda los goyanos llevaron alimentos no perecederos que serán distribuidos atraves de Caritas Diocesana.-