Las inundaciones no cesan en el noreste de la Argentina y las previsiones climáticas tampoco ayudan a tranquilizar a los habitantes de Corrientes, Santa Fe, Chaco y Entre Ríos, principalmente.
Cada día que pasa se multiplican los evacuados, que son destinados habitualmente a establecimientos educativos o complejos comunitarios.
Según el ICAA, en Corrientes llovió más de 350 mm en lo que va del 2019 y ya son más de 2000 las personas evacuadas por las inundaciones.
En Chaco, donde llovieron 473 milímetros en un mes, el número de evacuados alcanza los 832. Muchos de ellos, informaron medios locales, deben volver por la noche a sus domicilios afectados por el agua para evitar los robos.
La gobernación trabaja en los desagues y la limpieza de los canales porque se prevé que las lluvias continúen durante esta semana.
En Entre Ríos, por ejemplo, se espera que el río Uruguay siga creciendo y en caso de que llegue a 12,50 metros deberán ser evacuadas 150 familias. Actualmente está en 11,69 y las previsiones más pesimistas calculan que crecerá hasta 13,50 metros.
En esa provincia ya fueron trasladadas 24 familias.
La provincia de Santa Fe, en su región Norte, también sufre por las lluvias que no cesan: el 80% de la localidad de Villa Minetti está bajo el agua. Hay alrededor de 400 familias evacuadas y el número podría aumentar.