José Fonseca, el joven de 18 años recibió una descarga eléctrica de 25.000 voltios cuando viajaba en el techo de una formación del Tren Roca el lunes por la mañana, murió esta madrugada en el Hospital Fiorito de la localidad bonaerense de Avellaneda, a causa de un "paro cardiorespiratorio", según informó el ministerio se Salud bonaerense.
"El deceso se produjo por un paro cardiorrespiratorio motivado por las severas lesiones producidas por la descarga eléctrica, con quemaduras que comprometían casi el 80% del cuerpo, lo que generó la falla orgánica", indica el parte del ministerio.
Fonseca viajaba con otro amigo, Ciro Ferreyra, de 20 años, desde Mar del Plata donde trabajaban como malabaristas durante el verano. Ferreyra no resultó herido de gravedad y ese mismo día declaró en la comisaria y dijo que habían decidido volver a dedo pero como nadie los levantó en la ruta 2, se subieron al tren Roca.
Recorrieron casi todo el viaje bien, hasta que el tren cambio de vía y se conectó a la línea eléctrica. En un momento, José se levantó para agarrar algo de la mochila y "salió volando" a causa de la descarga. Al princiío se creía que Fonseca había hecho contacto con la catenaria pero luego determinaron que el joven no tocó la catenaria directamente y que se quemó por la energía que irradia que puede alcanzar el metro y medio de distancia, explicaron fuentes de Trenes Argentinos.
La UFI 1 descentralizada de Avellaneda, a cargo de la fiscal María Olmos Coronel, tiene a cargo la investigación y ya labró actuaciones por "lesiones por accidente".