Un comunicado de la cadena de hipermercados Carrefour, emitido desde Buenos Aires sobre un pedido de quiebra, fue suficiente para que en las sedes de Corrientes capital creciera rápidamente la preocupación ante la posibilidad de que la firma despida a trabajadores.
La compañía francesa tiene 18 mil trabajadores registrados en toda la Argentina y 175 son de Corrientes capital: 150 en el hipermercado ubicado en Chacabuco e Independencia y otros 25 en el supermercado de la peatonal Junín.
Corrienteshoy.com pudo saber que la central de Carrefour en Argentina considera que los números no le cierran a la firma por la caída de ventas en las principales sucursales, no así en Capital correntina, por lo que desde enero pasado ven la necesidad de aplicar una política de ajuste para reducir costos fijos.
Los lugares donde más se notó la merma en las ventas, en comparación con los locales de otras firmas, son sucursales de la Capital Federal, provincia de Buenos Aires, Córdoba, el Gran Rosario y Santa Fe, mientras que en Corrientes las ventas se sostienen.
Este medio pudo saber que la sede correntina, que funciona desde el año 1997, enero pasado ya se hablaba de despedir a 18 trabajadores para sumar un total de 50 desplazados en el primer semestre. Al mismo tiempo, se pensó en cerrar algunas de las sucursales más pequeñas, es decir, los supermercados.
Pero ese plan quedó suspendido y las posibilidades de despidos rebrotaron este jueves con un crudo comunicado que la lanzó la firma en Buenos Aires: el texto avisó que la empresa pidió concurso de quiebra, algo impensado hasta hace dos años en Argentina teniendo en cuenta que, junto con Walt Mart, es una de las cadenas más grandes del mundo.
Más datos
Corrienteshoy.com pudo saber que, en medio de esta situación complicada por caída del consumo, llegó al país un director gerente proveniente de Tailandia. El directivo comenzó a revisar los números de la empresa y habría considerado aplicar un plan de ajuste en el primer semestre de 2018 en Argentina.
El tailandés ya se reunió con el ministro de Trabajo de la Nación, Jorge Triaca, y con el líder del Sindicato de Empleados de Comercio, Armando Cavalieri, y solo espera una respuesta al documento presentado a ambos para que los trabajadores sean afectados en la menor medida posible.
El gobierno de Mauricio Macri mantiene con hermetismo el documento, que solicita que se respalde con el sindicato la posibilidad de abonar solo el 50% de la indemnización a aquellos empleados que pueden ser despedidos.
Sin dudas, ir a trabajar todos los días a las sedes implica llegar preocupado y tratar de averiguar qué información surge en el día sobre el futuro de las sedes de Carrefour. Es lo que pasa en Corrientes y Resistencia luego del comunicado oficial que cayó como un balde de agua fría.
Es evidente que la firma necesitará volver a emitir un comunicado para llevar tranquilidad a sus empleados y proveedores, aunque si buscó dar un golpe de efecto para meter el temor a despidos entre sus empleados logró claramente ese objetivo.