Con el Decreto Nacional del Presidente Alberto Fernández, se estableció desde ayer la medida que impide la circulación de personas entre las 23 y las 6. A esa medida los gobernadores deben adherir o no. El mandatario cordobés, Juan Schiaretti, dijo ayer por la tarde que su distrito seguirá como viene funcionando hasta ahora.

"Hemos decidido que vamos a seguir con el sistema de trabajo con el cual veníamos hasta hoy. Es decir, la actividad industrial funcionará las 24 horas, los comercios hasta las 23 y los bares y restaurantes hasta la 1 de la mañana", dijo.

Por su parte, Jorge Capitanich del Chaco lo aplicará con la llamada sirena sanitaria. Una alarma que suena minutos antes de empezar el toque de queda.

En Misiones, Oscar Herrera Aguad, se anticipó a la medida presidencial y limitó la actividad comercial. Bares y restoranes empezaron a cerrar a las 23 desde el pasado lunes.

En Posadas, la capital misionera, la situación epidemiológica es complicada como en el interior provincial.

En Corrientes, Gustavo Valdés no habló ni su administración dio comunicado oficial a la ciudadanía sobre qué decisión tomará la provincia.

El mandatario provincial participó de reuniones virtuales con el Presidente y con intendentes, pero no dio a conocer sobre qué hará. Si adherirá o no a la medida restrictiva nacional.

Hasta hoy la ciudadanía correntina no sabe si puede circular o no pasadas las 23.

Solamente por trascendidos se sospecha que el llamado toque de queda sanitario se aplicará en las comunas complicadas por la cantidad de contagios.

De ser así, aplicando ese criterio, la Capital provincial debería adherirse a la medida presidencial, ya que la ciudad de Corrientes es uno de los principales focos de contagio con un promedio diario de 200 casos positivos.

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