Desde el mediodía habrá un nuevo encuentro en Buenos Aires entre representantes de las cámaras empresariales y la UTA. En el medio, se vive una situación de gran tensión ante la posibilidad de un paro por 72 horas, que podría darse como consecuencia de un endurecimiento del conflicto por desacuerdos salariales. A nivel local, el sector gremial espera instrucciones de la cúpula sindical, en un contexto donde se incluyen los términos del proceso preventivo de crisis que –en principio- les impediría avanzar con las medidas.

 

La medida de fuerza a nivel nacional está relacionada a una recomposición salarial del 20% más una suma fija de $ 16.000 (en cuotas) que acordó UTA central con empresarios de algunos distritos.

 

Las diferencias en relación a esto motivaron, la semana pasada, que hubiera una huelga de choferes de 48 horas que afectó a varias provincias, entre ellas Corrientes.

 

En nuestra ciudad, cualquier decisión sindical está enmarcado en el proceso preventivo de crisis que le impediría concretar medidas, aunque desde la UTA se apeló –al menos en la anterior oportunidad- que se responde a los mandos naturales del sindicato a nivel nacional.