Los grandes mayoristas se niegan a entregar mercadería hasta no tener un panorama claro del valor de los insumos básicos de la canasta familiar. Los panaderos acusan que no se les entrega la harina, y puede resentir la fabricación de panificados. Los aumentos rondarían el 15 %.ientras el dólar este  martes ronda los 60 pesos, el litro de leche se vendía a ese valor o un poco menos, y desaparecieron los carteles de los Precios Cuidados y Precios Esenciales en las góndolas.

 

Varios productos directamente lucen sin precios y sólo es posible saber al pagar en la caja. La carne en tanto tuvo una trepada de entre el 5 y el 7 %,

 

La leche, harina, azúcar y aceite entre otros productos que ingresan de afuera de la provincia y precisan del transporte, son los que acusan la incertidumbre de su valor, auqnue son de mayor consumo  por parte de la población.

 

Las ofertas con tarjeta de crédito desaparecieron como también las las propias de los comercios.

 

Desde las grandes cadenas de supermercados, en tanto, explican que desde ayer a la tarde las empresas proveedoras —sobre todo las alimenticias— dejaron de tomar pedidos para próximas entregas e incluso algunas ya están hablando informalmente de "nuevas listas" con aumentos previstos de alrededor del 10 por ciento.

 

"Hay una suspensión generalizada de ventas por parte de las empresas proveedoras. Desde ayer no se pueden realizar nuevos pedidos y a los que estaban pendientes de entrega se le quitaron los descuentos que estaban previstos", explicó a Infobae Alberto Guida, presidente de la Cámara Argentina de Distribuidores y Autoservicios Mayoristas (Cadam).

 

La mayoría, aseguran, está esperando que el dólar se estabilice en un nuevo valor para poder ajustar sus precios. "Si vos tenés una devaluación determinada rápidamente tenés los precios actualizados. Pero el problema es que el valor del dólar desde ayer se mueve constantemente y genera incertidumbre. El 80% de los insumos de la industria de consumo masivo son importados", alertó Guida.



En una de las grandes cadenas detallaron que durante la tarde del lunes recibieron llamados de las empresas de electrodomésticos que pedían frenar las ventas por un tiempo y mientras tanto comenzaron a recibir informalmente —nada por escrito, impreso ni por e-mail— algunas listas con subas del 10% en alimentos, especialmente los vinculados con commodities, como las harinas y aceites, que ya tomaban un dólar de entre $55 y $62. "Las empresas buscan acolchonarse y recuperar en el corto plazo. Pero hoy no tenés margen para aumentar", advirtieron.

 

Luego del resultado electoral, se produjo una brusca devaluación con una fuerte disparada del dólar. Esto trae como consecuencia un movimiento de precios por la incidencia de la moneda norteamericana en el costo de producción de alimentos.

 

En el transcurso del día, empresas enviarán una nueva lista de precios con un aumento estipulado del 15%.

 

Además del nuevo ajuste de precios, los empresarios están preocupados por el programa "Precios esenciales" y se abre el interrogante sobre si seguirá el plan o será renegociado en las próximas horas.

 

Una fuente de una de las alimenticias más grandes, manifestó: "Es una locura que nos obliguen a mantener esos precios. Todavía no hay una negociación abierta, pero nos vamos a reunir en los próximos días seguramente".

 

Por otro lado, el dueño de Cabrales, Martín Cabrales, aseguró en declaraciones radiales que claramente las variables macro que se establecieron para ese "acuerdo de caballeros" cambiaron y que habrá que revisarlo.