Con razón del estreno de "Pelotero del mundo", la película dirigida y realizada por el cineasta Damián Finvarb y el periodista Ariel Borenstein —bajo el auspicio del Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (INCAA)—, nace la reflexión sobre la importancia de nuestro país como "semillero".
¿Qué se puede ver en este film? La dinámica febril del puerto de Rosario al ritmo de la exportación de materias primas, al tiempo que pone la cámara sobre el proceso formativo de jóvenes futbolistas tanto en clubes de barrio como en otros vinculados a equipos europeos; en entidades históricamente especializadas en el desarrollo de las inferiores como en otras ligadas a fondos de inversión.
Esta película es un fiel reflejo del proceso que se vive en miles de casas, donde los pies de un chiquito son la materia prima de las familias que buscan "llegar", con todo lo que eso implica. Un suelo donde el talento fluye y surge año tras año, como fuente inagotable de ese "algo" que hace al gen argentino.