Este miércoles Argentina ha sido completamente paralizada debido a una huelga de transporte en protesta contra las medidas económicas implementadas por el Gobierno del presidente Javier Milei. A lo largo de toda la jornada no ha habido trenes, metro ni aviones, lo que produjo serias complicaciones y caos en todo el territorio nacional. Además, ha habido movilizaciones en distintos puntos del país.La parálisis de los servicios ocurrida esta semana es solo una primera medida de varias , según advirtieron este miércoles al Gobierno los representantes de los diferentes gremios que adhirieron a la protesta. «Recién estamos entrando en calor», aseguró uno de los miembros de la Mesa Nacional del Transporte en una rueda de prensa brindada avanzada la tarde, en la que se hizo referencia a la huelga realizada contra el ajuste económico impulsado desde la Casa Rosada.Noticia Relacionada estandar Si La Universidad de Buenos Aires acusa al Gobierno de Milei de atentar contra la libertad académica Guadalupe Piñeiro Michel | Corresponsal en Buenos Aires «Entendemos que no es su competencia, y creemos que lo que se busca es controlar no solo los gastos, sino también lo que se enseña y cómo se enseña», argumenta la entidadA varias horas de comenzar el cese de actividades, los manifestantes consideraron que la medida de fuerza resultó todo un éxito y afirmaron que «el acatamiento fue del 100%». Pablo Biró, del gremio de pilotos, realizó una dura advertencia a Milei: «El Gobierno no sabe dónde se está metiendo». También estuvieron presentes en la rueda de prensa representantes de otros gremios. Entre ellos, Pablo Moyano (Camioneros), Juan Pablo Brey (Aeronavegantes), Omar Maturano (La Fraternidad), Juan Carlos Schmid (FEMPINRA) y Raúl Durdos (SOMU).A su vez, dejaron bien en claro que habrá más medidas en los próximos meses. De hecho, la semana próxima los representantes de distintos sectores llevarán a cabo otra reunión en la que definirán los pasos a seguir en este sentido. «A este Gobierno, como a otros anteriores, no le gusta que estemos organizados en un club de barrio, y los quiere privatizar. Tampoco le gustan las organizaciones sindicales. Es un Estado que no pretende hacer las cosas que debe hacer un Estado nacional. Pretende ser un Estado recaudador. Para cobrar impuestos son los primeros de la vida«, dijo este miércoles Omar Maturano, secretario general del sindicato de conductores de trenes.Contra los sindicalistasDesde primera hora del miércoles la Casa Rosada mostró su fuerte preocupación por las consecuencias de la huelga de transporte. El mismo presidente Milei publicó desde sus redes sociales oficiales diferentes mensajes e imágenes en las que criticó con cierta ironía a los sindicalistas.Otros funcionarios del Gobierno argentino también lanzaron críticas contra la medida de fuerza. Fue el caso del secretario de Transporte, Franco Mogetta, quien se refirió públicamente a un «boicot político» de un grupo particular «que está tratando de organizarse para complicarle la vida a un Gobierno que no para de crecer».Sin embargo, hacia el cierre de la jornada los principales medios de comunicación locales informaban que finalmente la huelga que estaba prevista para el jueves –a modo de continuación de la jornada previa- quedaba suspendida dado que el Gobierno había alcanzado un acuerdo con algunos sindicatos.Concretamente, el Gobierno negoció con la Unión Tranviarios Automotor (UTA) y con los empresarios de esta área un aumento salarial para los conductores de autobuses, lo que derivó en una cancelación de la medida de fuerza que estaba planeada para el jueves y que iba a tener un impacto en las líneas de autobuses que circulan por el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA). El acuerdo tuvo lugar en una audiencia de conciliación llevada a cabo por la Secretaría de Trabajo.