Boca logró regresar a la victoria por Copa de la Liga, donde cortó una sorprendente racha de dos derrotas consecutivas y un empate, pero además, había podido conseguir tan sólo un triunfo en su casa por el certamen doméstico. El conjunto de Almirón venció por 2-1 a Unión en un partido en el que contó con un jugador más durante todo el segundo tiempo.
En el primer tiempo, Marcos Rojo abrió el marcador con un gol de cabeza, pero encendió las alarmas con una molestia muscular que lo retiró del campo de juego y pidió el cambio. El central será, de todas maneras, una baja sensible para enfrentar a Fluminense el 4 de noviembre en la gran final de Copa Libertadores, debido a que fue expulsado por doble amarilla en semifinales ante Palmeiras.
Pese a esto, según informó Ignacio Bezruk a TNT Sports, el jugador de Boca, quien viene en un semestre en el que las lesiones no le permiten regresar en plenitud, descartó una posible lesión. Por esto, Almirón podrá contar con el defensor para enfrentar a Racing en el Clásico por Copa de la Liga, el próximo martes en Avellaneda.
Con la victoria ante el Tatengue, el Xeneize logró salir de los últimos puestos en la zona B de la Copa de la Liga, donde registra 10 puntos, a 4 del último cupo para la clasificación a la próxima fase del certamen del fútbol argentino. Pese al mal rendimiento, el conjunto de Almirón compite en todos los frentes, ya que se encuentra en semifinales de Copa Argentina y la respectiva final de Copa Libertadores.
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