Son las únicas dos prestaciones que dependen del Estado en las que el oficialismo puede mostrar una compensación contra las variaciones de precios.



A partir de junio aumentarán nuevamente la Tarjeta Alimentar y la Asignación Universal por Hijo (AUH), informó este miércoles el ministerio de Capital Humano. El incremento llegará al 41,48 por ciento, lo cual permitirá al Gobierno mostrar una recuperación por arriba de la inflación acumulada. De acuerdo al Instituto de Pensamiento y Políticas Públicas (IPYPP), son las únicas dos prestaciones que dependen del Estado en las que el oficialismo puede mostrar una compensación contra las variaciones de precios.



Según informó la cartera que dirige Sandra Pettovello, a partir de junio la AUH experimentará un incremento del 41,48 por ciento, alcanzando un total de 74.354 pesos por cada hijo menor de 18 años perteneciente a un grupo familiar sin trabajo o que se desempeña en la economía informal.



En mayo, los beneficiarios de la AUH recibieron 52.554 pesos. De esa suma, se acreditó el 80 por ciento, equivalente a 42.043 pesos, mientras que el 20 por ciento restante se retuvo hasta que se entregase la Libreta de la Asignación Universal en el caso de los menores de 4 años. Su presentación fue obligatoria y certifica que los menores han cumplido con los requisitos de escolaridad, así como con los controles de salud y vacunación. Esto también permite a las beneficiarias cobrar la Ayuda Escolar Anual, que este año fue de 70.000 pesos.



En cuanto a la Tarjeta Alimentar, las subas en el sexto mes del año se aplicarán según la cantidad de hijos que tenga cada familia. Los nuevos valores serán los siguientes: 52.250 pesos para familias con un solo hijo, 81.936 pesos para familias con dos hijos y 108.062 pesos para familias con tres hijos o más.



Tal como señalaron desde el IPYPP a PáginaI12, tanto la AUH como la Tarjeta Alimentar fueron las únicas prestaciones que se recompusieron en términos reales desde la gestión de Javier Milei. Puntualmente la AUH aumentó 259,9 por ciento nominalmente entre diciembre de 2023 y junio de 2024, mientras la Tarjeta Alimentar subió 137,5 por ciento. El resto de las prestaciones que dependen del Estado perdieron contra la inflación: salario mínimo, jubilaciones (con y sin bono) y ex Potenciar Trabajo.



Si se toma un período de tiempo más extenso, esas recuperaciones nominales no alcanzan a ganarle a la inflación. Aclaran desde el Instituto que, por ejemplo, si se compara contra diciembre de 2021 hasta abril de este año el salario mínimo caía 31 por ciento en términos reales, la AUH y Alimentar un 20,9 por ciento, los ex Potenciar Trabajo un 51,3 por ciento y la jubilación mínima con bono un 35 por ciento. La mejora más sustancial en la AUH se produjo en enero, porque en diciembre todavía había caído mucho.



Por otro lado, señalan desde el IPYPP, que la AUH creció por encima de lo que crecieron las asignaciones familiares contributivas que perciben los trabajadores formales. Otra cuenta pendiente en la equidad distributiva de este gobierno.