El equipo correntino le ganó en el final del encuentro a Douglas Haig 1-0 con un tanto marcado por el pibe Agustín Braure. La producción del local no fue buena, pero se animó a buscar el arco rival en los últimos minutos y la actitud asumida tuvo su premio.

Cuando las esperanzas se desvanecían, Boca Unidos marcó y pudo romper con el maleficio para festejar por primera vez el triunfo en su cancha en el torneo Federal A 2021 con un gol marcado por el juvenil Agustín Braure para vencer a Douglas Haig de Pergamino por 1 a 0.

El partido, correspondiente a la octava fecha de la zona B, no fue para nada atractivo, mostrando las falencias del equipo local en el manejo de la pelota, que a la vez creaba zozobras en el fondo, además de su falta de profundidad ofensiva ante un rival que no supo aprovechar las ventajas concedidas.

Un flojo primer tiempo jugó Boca Unidos anoche. Los problemas en la salida se presentaron ante la presión de Douglas Haig, que desnudó limitaciones e imprecisiones del equipo correntino en la zona de gestación, a tal punto que antes del primer cuarto de hora ya estaban amonestados Silva y Burgos, que debieron acudir a faltas “tácticas” para frenar el ataque del rival.

El local se mostró extremadamente lento en el traslado y muy predecible al momento de jugar la bola; mientras que la visita buscó sorprender en velocidad cuando recuperaba la pelota.

Sin embargo, la primera situación de peligro fue de Boca Unidos. Un centro de López, desde la izquierda, la bajó Maidana de cabeza para Frutos, pero el arquero Carrera leyó bien la jugada y tapó abajo.

Promediando la etapa Douglas Haig se paró decididamente en el campo adversario ante la pasividad demostrada por el conjunto correntino.

Una pelota que perdió Burgos en el medio por poco no termina en gol. Mazza ensayó un centro que rebotó en su marcador y se desvió, debiendo exigirse De León para meter el manotazo salvador contra el caño izquierdo para evitar que la pelota se metiera en el arco.

En los últimos minutos del encuentro, el local llegó de contraataque. Gabi Morales habilitó a Maidana que, con el arquero a mitad de camino y con su mejor perfil, no se animó a tirarla de emboquillada, alargando demasiado la pelota que terminó rechazando Carrera.

Sobre el final de la primera mitad, Godoy rifó la pelota en una salida ante Seratto, que combinó con Mazza, que desbordó y se la devolvió a su compañero, cuyo zurdazo pasó a centímetros del parante derecho del arco de De León.

En el inicio del complemento continuó todo igual. El equipo Aurirrojo siguió equivocándose feo en el manejo del balón y el Fogonero insinuaba más de lo que concretaba.

Una nueva lesión de Moscarelli encendió las alarmas en el local. El juvenil tuvo que abandonar de nuevo la cancha dejándole esta vez su lugar a Leonel Ceresole, hundiéndose a “la cueva” Iván Silva para hacer dupla de centrales con Ariel Morales, sumando Roberto Marioni un jugador con otras características a la mitad de la cancha.

La primera acción de peligro del segundo tiempo llegó recién después de más de media hora de juego y tras un tiro de esquina. El equipo correntino capturó un rechazo corto en el área rival, derivando la pelota en Ceresole, que sacó un zurdazo a colocar contra el segundo parante que Carrera envió al córner.

Más decidido, Boca Unidos reaccionó en los últimos minutos con los ingresos de los pibes. Primero, Agustín Braure entró por Frutos y, luego, Leonel Niz hizo lo propio con Luna. El local comenzó a llegar, aunque no mostraba seguridad atrás. Un centro de Godoy desde la derecha no llegó a puntear por poco Ceresole, y Carrera se anticipó a Gabi Morales para alejar el peligro.

Siguió insistiendo Boca Unidos, ya decididamente instalado en terreno de Douglas Haig. Un disparo de Ceresole que se desvió en la marca se fue al córner tras un rebote, en otra acción que podía ser más peligrosa de lo que fue.

El gol, que todo el estadio gritó, llegó unos minutos después. Godoy encaró decidamente desde el lateral hacia el medio, jugando para Gabi Morales, que habilitó para López, sumado al ataque como si fuera un delantero. El lateral metió el centro bajo que se fue alejando de Carrera, Albornóz quiso enviar al córner, pero Niz barrió bien abajo, llegando la pelota para que el pibe Braure empuje la pelota a la red a centímetros de la línea.

En el final, Douglas Haig fue con todo en busca de la igualdad, pero esta vez Boca Unidos se defendió con acierto, e incluso le quedaron un par de pelotas que pudo haber aprovechado para sentenciar el resultado.

En el último partido de Roberto Marioni como técnico interino (¿seguirá?) el equipo pudo abrochar el triunfo tan esperado, aunque sigue en deuda desde el juego.

Fue finalmente victoria de Boca Unidos, que se hizo de los tres puntos por primera vez de local en el campeonato, y cortó una racha de cuatro partidos sin ganar. A comenzar el necesario despegue.