Un relevamiento hecho por funcionarios nacionales en el centro de la provincia, desde Mercedes y zonas aledañas marca un 96% de campos quemados. Ahora el drama empieza con la falta de pasturas para el ganado.

Ni se apaga el fuego y ya empieza otro drama. Un impacto que se sentirá a mediano plazo en una sector primario y único productivo de la provincia, la ganadería no tendrá y ya no tiene, pasturas para su ganado.

Producto de los incendios en toda la geografía provincial que se mantienen activos. Tras un relevamiento en campos del centro de la provincia se determinó pérdidas de entre 80% y 96%, es decir, total.

Los dirigentes ruralistas esperan ahora la declaración de una Ley de Emergencia Agropecuaria que les posibilitará acceder a subsidios y créditos a través de fondos nacionales.

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