Falta menos de un mes para las Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias (PASO). Estamos en plena campaña electoral. Las agrupaciones que participan de los comicios realizan actos de campaña, difunden spots en radio y televisión, colocan cartelería en la vía pública y realizan encuestas de opinión, entre otras actividades. Para esto cuentan con financiamiento público y privado.



En esta nota, nos vamos a enfocar en el dinero que reparte el Estado. Cómo se asigna, qué dice la ley y qué precandidatos presidenciales reciben más dinero para su campaña.

Cómo se asignan los fondos públicos para las campañas

La Ley de Financiamiento de los Partidos Políticos, sancionada en 2006 y reformada en 2009, establece que para la campaña electoral de las PASO se debe repartir el equivalente al 50% de lo que la Ley de Presupuesto asigna a las elecciones generales. Estos fondos no se reparten íntegramente de igual manera.

Hay una parte que se asigna de manera igualitaria entre todas las alianzas, partidos o confederaciones. Es el dinero que se destina a la impresión de boletas. La ley establece que la Dirección Nacional Electoral (DINE), un organismo público que depende del Ministerio del Interior, debe entregar a las agrupaciones los recursos económicos que les permitan imprimir el equivalente a una boleta y media por elector registrado en cada distrito. Para eso se establece un valor de referencia, que este año se fijó en $ 2,92 por boleta.

Para las PASO, en la categoría presidente y vicepresidente, la DINE asignó $ 103 millones a cada una de las 15 alianzas que presentan fórmula (una o más) para la impresión de boletas.

El resto de los fondos se asignan para lo que se denomina “aporte extraordinario de campaña”, es decir, el financiamiento del Estado para que las agrupaciones desarrollen la campaña política. Para la categoría presidente y vice, la DINE repartió un total de $ 650 millones (la mitad de lo que se distribuirá en las generales).

Pero esos $ 650 millones tienen otro criterio de asignación. La mitad se asigna de forma equitativa entre todas las fuerzas. Y la otra mitad se reparte en forma proporcional a la cantidad de votos que las agrupaciones hubieran obtenido en los últimos comicios para la misma categoría, en este caso, las presidenciales de 2019.

Además, hay otro aporte indirecto establecido por ley. En cada año electoral las emisoras de radio y los canales de televisión están obligados a ceder el 5% de su programación para los spots de candidatos (la mitad de forma gratuita y la otra mitad, a cuenta de impuestos nacionales). La distribución de los espacios de radio y TV entre los partidos se hace de la misma forma que el dinero: la mitad de forma equitativa y la otra mitad, en forma proporcional a la cantidad de votos obtenidos en la elección general anterior para la categoría diputados nacionales.

“Los subsidios directos e indirectos contribuyen a que los partidos puedan pagar sus gastos corrientes y las actividades indispensables de sus órganos de decisión y espacios de participación, y a que todas las agrupaciones que participan de elecciones nacionales puedan pagar sus boletas y acceder a los medios masivos”, señala un informe del Centro de Implementación de Políticas Públicas para la Equidad y el Crecimiento (Cippec).

Cuánto recibe del Estado cada alianza electoral para la campaña presidencial

La alianza que más fondos recibe para la categoría presidente y vice es Unión por la Patria, que promueve las precandidaturas presidenciales de Sergio Massa y Juan Grabois. Si se suman los fondos para las boletas y el aporte extraordinario de campaña, la coalición que representa al oficialismo recibió $ 290 millones para las PASO.

Como se mencionó anteriormente, una parte de los fondos se reparten de acuerdo con los resultados electorales de la elección anterior para la misma categoría. Es decir que la comparación es con 2019, comicios en los que el Frente de Todos, versión anterior de Unión por la Patria, se impuso en primera vuelta.

La segunda fuerza que más fondos recibió es Juntos por el Cambio, que lleva a Horacio Rodríguez Larreta y Patricia Bullrich como precandidatos presidenciales. La DINE le asignó $ 259 millones, si se suman los montos destinados a las boletas y al aporte de campaña. La tercera fuerza que figura en los registros oficiales es el Frente de Izquierda, que dirimirá su primaria presidencial entre los precandidatos Myriam Bregman y Gabriel Solano. Esta alianza recibirá $ 133 millones del Estado.

A continuación le siguen 3 alianzas, que recibirán $ 131 millones cada una: La Libertad Avanza, cuyo precandidato presidencial es Javier Milei; Hacemos por Nuestro País, con una fórmula encabezada por Juan Schiaretti; y el Frente Liber.ar, que presenta 3 precandidatos presidenciales: Julio Bárbaro, Nazareno Etchepare y Ramiro Vasena.

El resto de las alianzas reciben el monto mínimo, que se compone de los $ 103 millones destinados a las boletas, más los $ 23 millones de aporte extraordinario de campaña del apartado que se divide de forma equitativa entre todos los partidos.

El mismo informe de Cippec mencionado anteriormente advierte: “Existen indicios de que los subsidios directos (especialmente los destinados a la impresión de boletas) podrían estar alentando la creación de partidos y la presentación de candidaturas con el solo fin de captar esos recursos. Con requisitos poco exigentes para el mantenimiento de la personería y la presentación de candidaturas nacionales, los subsidios podrían ser un factor a la hora de explicar el número inusualmente alto de partidos que hoy existen en nuestro país”.