La Municipalidad de Corrientes se encuentra trabajando a destajo en distintos barrios desde las primeras horas de este lunes  para agilizar el escurrimiento de la gran cantidad de agua caída sobre la Ciudad Capital.

 

Al frente de los operativos se encuentran la viceintendenta, Any Pereyra; la secretaria de Coordinación General, Irma Pacayut, el titular de Infraestructura, Daniel Flores y el subsecretario de Ambiente, Mario Duarte.

 

Los operativos se llevan a cabo a través de numerosas cuadrillas de trabajadores pertenecientes a diferentes áreas, que se encuentran presentes en una treintena de barrios anegados, para facilitar lo más rápido posible el escurrimiento, que se torna más lento a través de los desagües pluviales, raíz de la crecida del río Paraná.

 

Para impedir que el agua acumulada en calles y avenidas ingresen a los domicilios, desde la secretaría de Transporte y Tránsito a cargo de Gustavo Larrea se informó que el servicio de colectivos urbanos estará interrumpido, hasta tanto retornen las condiciones normales para cumplir con el mismo.

 

Hasta las 9.30 de la mañana cayeron más de 130 milímetros de lluvia, con el agravante que la mayoría fue con una intensidad muy alta (203 mm por hora, entre las tres y cuatro, por sobre los 144 mm por hora del pasado 24 de diciembre), lo que significa que en esta oportunidad cayó incluso más agua y con más fuerza en menos tiempo.     

 

“Se están desobstruyendo las bocas de tormentas y sumideros que estaban tapados por residuos arrojados a la vía pública, se retiran árboles caídos cuyas raíces fueron aflojadas por las últimas lluvias”,  dijo el secretario de Infraestructura, Daniel Flores.

 

El funcionario indicó que “en el barrio Ponce, uno de los más complicados, llevamos una bomba para facilitar el desagote, pero como no se cortó la energía todavía no pudo comenzar a trabajar, por lo que estamos gestionando un grupo electrógeno para ponerla a funcionar en forma inmediata”.

 

“Tenemos ocho retroexcavadoras a disposición y los canales de la ciudad que estuvimos verificando se encuentran trabajando normalmente, el mayor problema tiene que ver con la gran cantidad de agua caída en poco tiempo y los sumideros que se taparon por residuos arrojados en la vía pública”, expresó Flores.

 

Por otra parte, en algunos sectores de la ciudad se encuentra interrumpida la energía, por lo tanto no funcionan semáforos de varios cruces de calles y avenidas, por lo que se recomienda a los automovilista tomar las precauciones del caso.

 

Teniendo en cuenta que las perspectivas meteorológicas no son para nada halagüeñas, se solicita la colaboración de los vecinos para no sacar los residuos a la vía pública o a los contenedores, ya que el servicio está acotado a las calles donde pueden ingresar los camiones recolectores.