La senadora peronista, Carolina Martínez Llano salió por distintos medios, entre ellos en el programa Juntos con Rubén Duarte que se emite por radio Dos. También lo hizo por LT 7, LT 25 y radio Sudamericana, además de un sinfín de radios FM del Interior provincial. La oportunidad de las sucesivas entrevistas sirvió para analizar la votación en Senado del proyecto de paridad y analizar la actualidad política local, poniendo el foco en la realidad del PJ correntino. Remarcó que no se postula, pero tampoco se excluye de la responsabilidad de conducir el partido, aunque sí dejó expresada su voluntad de que pueda ser una mujer capaz de superar la grieta. Admitió que la impulsan para el cargo, aunque dijo que antes quiere ver el contexto bajo el cual saldrían las nominaciones y que le interesa la opinión de la Vicepresidenta, más allá que «debemos ser nosotros quienes llevemos la propuesta para Corrientes».

La senadora, Carolina Martínez Llano conversó con distintos medios en las últimas jornadas, y en una de las entrevistas, abordó el tema de la paridad de género, cuyo proyecto tuvo una polémica sesión en el Senado el jueves último, donde el oficialismo intentó aplicar manu militari para avanzar sin cambios en una iniciativa con «sabor a poco», dicho por propios y resignados integrantes de la UCR que, tal como lo anticipó Noel Breard, a la hora de la verdad se disciplinaron a los dictados de Salta y Mayo. Ante varias evidentes carencias de la propuesta oficial, se aplicaron algunos cambios menores, que no alteran el carácter machista del proyecto, lo que obligó a regresarlo a Diputados, donde su timonel tratará de sacarlo por unanimidad, más allá de algunas voces críticas que comienzan a surgir dentro de la bancada del Frente de Todos, que no encuentra argumentos para justificar el acompañamiento dentro del debate abierto por el tránsito del proyecto por el Senado, donde hubo posiciones contrapuestas, tanto en la UCR como en el PJ. Aunque sólo en este último se evidenciaron al momento de fijar posiciones.


«No quiero dejar de lado a todas las mujeres peronistas que fueron las impulsoras para que la paridad en Corrientes comienza a debatirse», manifestó Carolina, quien dijo que esta es una batalla cultural como lo es el voto joven, la boleta única y las Primarias provinciales. «Son temas que hay que instalar y llevan tiempo para que sea la sociedad quien abra la cabeza de los legisladores que pretenden mantener las estructuras del pasado», agregó. «Aquí esta la importancia del justicialismo en su rol opositor y la responsabilidad como senadores de marcar un camino», dijo.


Dejó en claro que «en el peronismo ya tenemos la paridad de género desde hace tiempo en nuestra Carta Orgánica», para luego aprovechar y referirse al proyecto que pasó a la Cámara alta. «Se cambió muy poco, las modificaciones con la que se impulsó no estuve de acuerdo, fueron fundamentalmente eliminar el artículo dos, y el tema de las sustituciones al momento de oficializar las listas», lamentó no sin antes señalar que la invocación de normas constitucionales es una cuestión opinable. «La ley marca un criterio interpretativo a la que deben sujetarse los legisladores que son los únicos jueces del título y diploma de sus miembros, y los autorizados a habilitar las incorporaciones conforme al criterio fijado por la Corte Suprema de Justicia de la Nación», indicó.


Carolina recordó que fue la impulsora de un proyecto hace un tiempo y que este año los otros tres senadores del PJ lo hicieron propio, proyecto que implica paridad para los tres poderes del Estado y el Tribunal de Cuentas, además de contemplar que a una mujer reemplace otra mujer, como rige en el orden nacional y en el de las demás provincias.


La Senadora del PJ comentó su postura en la sesión del jueves. «A sabiendas de que el radicalismo tenía los números para avanzar pensé que no teníamos por qué apartarnos de nuestras convicciones, apoyábamos la paridad de género en los tres poderes, no sólo en la Legislatura. Estábamos preparados para esto. Con la Cámara constituida en comisión tres de los cuatro senadores peronistas firmamos el dictamen de minoría. Yo sabía que siendo minoría en la Cámara perdíamos», señaló, «pero está claro que a veces perdiendo se gana porque permite explicarle al pueblo las razones por la que con todo respeto fijamos una posición distinta», agregó.


La legisladora rescató este aspecto. «La convivencia de estos ocho años que llevo en la Cámara alta con la bancada oficialista hace que sea natural expresar opiniones contrapuestas sin que nadie se moleste ni se enoje. Lo propio dentro del bloque. Sabiendo de la posición discordante de Martín Barrionuevo, establecimos antes libertad de acción. A la postre, cada cual es artífice de su propio destino», añadió la más antigua de su bancada.
«En el corrimiento de lista, mi idea era que, en el momento de confeccionarla y durante todo el ejercicio, si una mujer sale, la banca debe ser cubierta por otra mujer. Y si sale un hombre, que la cubra un hombre», enfatizó como detalle sustancial del que carece la iniciativa avalada por ECO.


«Si me aseguraban que la paridad iba a ser justa, íbamos a acercarnos a un consenso mediante concesiones recíprocas, pero esta paridad como salió me parece engañosa, por eso no acompañé el proyecto, fui fiel a mis convicciones», aseveró.


Para ser más gráfica y llegar a la gente, indicó que lo aprobado el jueves fue «una engaña pichanga».


Carolina reconoció que el circuito por el que transita el proyecto no derivará en una normativa superadora. «Creo que no es un avance, a pesar de que el tema llegó al recinto después de mucho tiempo dando vueltas. Es una cuestión que viene de hace muchos años», enfatizó.


Remarcó que desde la bancada justicialista se intentó replicar a escala provincial lo que sucede dentro de la fuerza, ya que «en el peronismo sí hay paridad de género en las listas, por eso queríamos que se siga esa misma línea ahora».


«Decía algún compañero que quedaríamos en minoría y perderíamos y que la prensa oficialista nos iba a matar. Son los riesgos y responsabilidades que debemos asumir. Si así hubiera sido, la crítica nos da mayores posibilidades de explicar las razones para que sea la gente la que forme su propia opinión», manifestó Carolina.


«En los hechos, la realidad de Corrientes en estos tiempos no es esa. Hay respeto y libertad de prensa como nunca antes. Yo rescato el respeto que todos los medios de la provincia sin excepción han tenido, y a todos he respondido. Podría decir que, como nunca antes en estos ocho años como Senadora. Sin duda, un tema que interesa.


«Hoy mismo el diario Época publica un reportaje de dos paginas en su edición dominical», comentó la legisladora.

«Necesitamos un interventor de tiempo completo»

La Senadora provincial no eludió la situación del PJ correntino del cual es una de las apoderadas. «Rescato la excelente relación con el equipo de la Intervención que conduce Juanchi Zabaleta. Estamos en diálogo permanente», remarcó no sin dejar de señalar que, a su criterio, el tiempo que se viene «exige la presencia de un Interventor de tiempo completo que, estando en la provincia, genere las reglas y condiciones para una competencia sana que conduzca -mediante la participación del afiliado- a la unificación y fortalecimiento del partido», dijo.


Consideró necesario pensar en los detalles previos a la normalización para luego realizar un acto electoral transparente, capaz de legitimar a quienes resulten elegidos para dirigir al partido. «No queremos más que nos manejen desde Buenos Aires», remarcó, aunque admitió que ello no implica dejar de reconocer el liderazgo que en el movimiento tiene Cristina Kirchner, con quien tiene prevista una reunión «para cuando estemos en condiciones de ir con un esquema de trabajo acorde a la realidad del peronismo correntino», indicó.


«Un amigo común, muy cercano a la Vicepresidente, lo planteó hace un tiempo y expresé, como no podía ser de otra manera, total complacencia», comentó.


Sobre la acefalía latente en la principal fuerza opositora de Corrientes, la legisladora fue contundente al resaltar un aspecto clave, en medio de una andanada de dirigentes y extra partidarios -que acompañan dentro del Frente de Todos- que ya están proponiendo candidatos a presidente partidario: «Para ir a una interna, antes hay que definir aspectos centrales tales como la reforma de la Carta Orgánica, el consenso en torno al reglamento y cronograma electoral, asegurar la contratación del Correo Argentino, definir los lugares de votación, la integración y lugar de funcionamiento de la Junta Electoral, entre otras cosas», indicó.


Carolina se mostró proclive a desdoblar las internas para que primero se vote en los 74 municipios, eligiendo sus autoridades y conformando el Congreso del partido. Luego, la puja bajo el concepto de listas respecto a las dos o tres opciones que pueda haber para la conducción.


En cuanto a las reformas a la Carta Orgánica, dijo que aparte de desdoblar las elecciones, «sería oportuno definir que serán a padrón cerrado, tanto las electivas como las partidarias». Apostó a volver al sistema de mayoría y minoría para el Consejo provincial y remarcó que «hay que analizar un sistema mixto donde algunas candidaturas surjan de manera indirecta, vía Congreso».


«Quiero un Congreso que vuelva a ser la autoridad soberana del partido, único habilitado para definir alianzas y corrimientos, de modo de jerarquizar a las representaciones territoriales y darles juego para acuerdos interdepartamentales que los conviertan en actores relevantes en las decisiones», manifestó.
«Las condiciones deben darse para que todos podamos participar en igualdad de condiciones, hay que hacer una serie de modificaciones a la Carta Orgánica», señaló.


Respecto a las versiones que apuntaron a noviembre como fecha posible, dijo: «Es una intención, son las ganas que tenemos todos los compañeros que queremos darle fuerza al partido, pero si no comenzamos ya, hoy es imposible que lleguemos a esa fecha ni siquiera para las elecciones municipales», lanzó con estratégica contundencia, no sin antes señalar que «fijar normas regulatorias en tiempos oportunos evita que las diferencias se trasladen al ámbito tribunalicio, que no es lo más saludable en términos de imagen y por lo acotado de los plazos electorales».


No se deben pasar por alto, en este análisis, los sucesivos hechos que vinieron derivando en calamitosas derrotas electorales. El tema financiero es una realidad de primer orden, tanto para las internas, como para las generales, hay que contemplar la financiación «porque no podemos exponer a los compañeros a la estructura aceitada del Gobierno provincial, como viene sucediendo con resultados provinciales que no pasan el 20 por ciento», advirtió.
«La interna demanda estructura, experiencia, profesionalidad, y la decisión de poner plata, pero antes debemos tener en claro si trabajaremos con el concepto de lista o línea interna», especificó.


«Prefiero que en los pueblos los dirigentes provinciales o nacionales no interfieran. Que se legitimen las conducciones territoriales para la redefinición de interlocutores con peso real para el armado provincial. No debemos olvidar que el resultado final es la suma de los 74 pueblos, y si no hay participación plena ni una elección sana en los municipios seguiremos cometiendo los errores que nos condujeron a sucesivas derrotas», describió.