La Universidad Nacional de Rosario (UNR) informó que en los últimos 20 años creció casi un 10% la cifra de habitantes del Gran Rosario mayor de 24 años que cuentan con estudios universitarios completos.

La cifra surge de un informe de la Usina de Datos de la UNR en base a la Encuesta Permanente de Hogares (EPH) del Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec), donde los registros señalan que en 2003 la cantidad de personas del aglomerado con título universitario era del 15,5% y en 2023 subió hasta el 23,1%, un incremento del 7,6%.

Puntualmente en Rosario, las estadísticas indican que el 43% de la población mayor de 17 años ha incursionado en la educación superior, de los cuales el 23% llegó a recibirse y el 20% todavía está cursando o la dejó inconclusa, según los datos recogidos por la Encuesta de Hogares (EHR) de la universidad.

Es decir, tres de cada diez rosarinos mayores de 24 tienen el nivel superior completo, y un cuarto de los hogares (87.000) tiene al menos una persona que estudia o estudió en la Universidad Nacional de Rosario.

Además, del total de rosarinos que estudiaron o actualmente cursan en el nivel universitario, el 89% lo hace en una institución pública.

“Luego de las masivas manifestaciones en defensa de la educación pública, gratuita y de calidad, la discusión -y exigencia- por un presupuesto universitario para el año 2025 que dé previsibilidad a la gestión del sistema, además de un plan de recomposición salarial y la continuidad de las políticas de Ciencia y Tecnología, se torna urgente”, señalaron desde la UNR junto con la publicación de las estadísticas.

Es a raíz de ello que se resalta también la importancia “de cuantificar el alcance de la educación superior en la ciudad y en la región”, entendiendo que “el acceso a niveles educativos más altos transforma las trayectorias vitales de las personas, sus familias y sus comunidades”.

“Como reconoce la UNESCO, el nivel educacional alcanzado se traduce en mejores oportunidades laborales, mayor seguridad económica y acceso a bienes durables. La experiencia de la educación superior abre espacios de participación ciudadana. La educación superior es un derecho”, concluyeron.