María Vignolo, ex empleada de la Agencia Corrientes, declaró ayer y evocó a González Moreno. Acreditó el vínculo con la gestión arturista. Hay cosas que no recuerdo, las bloqueé porque fue tan traumático el final. María de los Ángeles Vignolo habrá dicho unas quince veces Hernán en los cerca de 90 minutos que duró su declaración ayer ante el Tribunal Oral Penal Nº 1 (TOP1). Jamás el apellido: González Moreno.
El extinto empresario y periodista fue evocado por la testigo, y junto a él, sus creaciones: Negocios Correntinos y la Agencia Corrientes, durante el primer tramo de la 25ª audiencia del juicio al ex gobernador Arturo A. Colombi (2005-09) y ocho funcionarios de su gestión por la denominada Causa Publicidad. Vignolo -técnica en publicidad, docente y comerciante, de 33 años- había sido contrataba en 2008 por González Moreno y según dijo su tarea era grabar en CDs y mandar por correo electrónico a un listado de medios (en el que figuraban importantes diarios provinciales, radios y un canal de televisión): propaganda de gobierno, spots de campaña de Colombi y notas elaboradas por periodistas de la empresa periodística.
En la entrevista de trabajo Hernán me dijo: Somos una agencia de publicidad y nuestro mayor cliente es el gobierno. Nunca supe quiénes eran los otros clientes, declaró la mujer, oriunda de Santo Tomé. Los dichos de Vignolo acreditaron el vínculo entre la Agencia Corrientes y el gobierno de Arturo Colombi, el cual -según la acusación de la fiscalía- configura un hecho delictivo, cuya modalidad ha sido calificada como la tercerización del manejo de la pauta oficial. La hipótesis es que la Agencia Corrientes suplantó ciertas funciones de la Dirección de Información Pública, canalizando la distribución de la propaganda estatal. Hubo un medio del interior que vino a reclamar por el pago y Hernán le dijo que vaya a Información Pública, recordó la testigo. González Moreno apareció muerto el 2 de octubre de 2009: tres días antes del balotaje entre los primos Arturo y Ricardo Colombi. Norte