Por la demanda que le inició a Cristóbal López por falta de pago de honorarios y por una deuda del 19% de la compra de Ideas del Sur, la Sala F falló a su favor. El monto total que se le debe a Tinelli ascendería a los 30 millones de dólares.

 

El miércoles Marcelo Tinelli renunció a la administración del club de sus amores, San Lorenzo, para dedicarse de lleno a la nueva productora que está armando para el Bailando por un Sueño 2018 y ayer recibió una buena noticia de la justicia que le dio la razón con su pedido de una medida cautelar para bloquear la venta del Grupo Indalo (todos sus medios de comunicación desde la televisión, radios y páginas web) al nuevo Grupo Ceibo, que es la parte compradora que si bien ya asumió la dirección le falta la aprobación judicial.



Indalo está metido en una gran maraña judicial y tironeado por muchos intereses. En el aspecto sólo de medios del Grupo Indalo (es dueña de casi 170 empresas de diferentes rubros, entre ellos, de granos y petróleo) la Cámara Comercial dictó la medida cautelar que les impide a sus antiguos dueños, Cristóbal López y Fabián de Sousa, desprenderse de los activos. En otra causa por evasión fiscal millonaria (cuyo monto asciende a los ocho mi millones de pesos), el juez Julián Ercolini se había expresado en el mismo sentido.

 

A mediados de octubre pasado, Tinelli llevó a juicio a las autoridades de Indalo por falta de pago de honorarios pactados y por una deuda del 19 por ciento de la compra de la productora Ideas del Sur. El monto total que se le debe a Tinelli ascendería a los 30 millones de dólares.



La Sala F, integrada por Alejandra Tévez y Rafael Barreiro, dictó una medida precautoria de no innovar que implica la prohibición de venta de los activos de Indalo con la intención de evitar que “se desprendan fraudulentamente de sus principales activos a cambio de una contraprestación” que aún no fue especificada.

 

Por lo pronto la situación es favorable a Marcelo Tinelli porque la justicia obliga a los antiguos dueños a que “se abstengan de causar, realizar, perfeccionar o ejecutar cualquier acto de disposición que altere o sea susceptible de alterar la actual composición de sus respectivos patrimonio”.

 

Sobre este aspecto judicial, Marcelo Tinelli no habló abiertamente pero en su cuenta de twiter se dedicó a hacer un retuit de las notas periodísticas que hacen referencia a la pulseada que Tinelli tiene con los antiguos y actuales dueños de Indalo. Por lo menos, Tinelli termina el año con un punto a su favor en la guerra judicial contra sus antiguos dueños.