Como olvidándose de su previsibilidad, de sus finanzas equilibradas y una provincia ordenada, el exministro de Hacienda, José Enrique “Chirulo” Vaz Torres, excomulgado por la puerta de atrás de la velocidad crucero del gobierno de Gustavo Valdés; quiere volver por la puerta grande de la Legislatura Provincial –la misma a la que muchas veces le dio la espalda desde su ministerio- y se impulsa raudamente hacia un sillón del Senado. Seguramente publicitado con esos mismos dineros públicos que alguna vez dijo ordenar.



La profusión publicitaria del gobierno es impactante, aunque allí se sabe que convence poco el perfil “técnico” del virasoreño.



Vaz Torres, con el paso del tiempo y su alejamiento del Palacio de la Moneda correntina, dejó a flote un montón de incómodas realidades económicas para los correntinos.



Pasó poco tiempo de la cesantía de Vaz Torres como ministro, según se dice, despedido por el gobernador Valdés, cuando se veía venir semejante latigazo de pobreza con un 49,3%, poniendo a los correntinos como los de peor bienestar económico y social en todo el país. Entonces el contador de Ricardo Colombi aseguraba siempre que se estaba en una provincia ordenada.



Ahora es candidato a senador provincial. Hasta hace poco fue ministro de Economía, donde merodeó sobre los dineros públicos correntinos alrededor de 18 años.



Corrientes de acuerdo a los datos del INDEC tiene el 49,3% de pobreza, la más alta del país. Según los entendidos, vale una aclaración: no es la más pobre; es la más empobrecida por Chirulo, sus políticas y su Gobierno de ECO.



Solo hay que consultar en los balances de la gestión Vaz Torres, donde –por ejemplo- en la última rendición de las Cuentas de Inversión (2017), se notó un rojo faltante de más de dos mil millones de pesos; ubicando a Corrientes, además, actualmente como una de las tres peores provincias con mayor déficit fiscal.

Chirulo lo hizo.