Por el desconcierto del inicio de las clases, con la nueva modalidad a raíz de la pandemia, los tutores están a la vanguardia para obtener más información de las escuelas antes de realizar la compra de nuevas indumentarias. A su vez, los vendedores, alertados por el ciclo lectivo pasado, cuando muchos alumnos pasaron de año sin utilizar la vestimenta reglamentaria, esperan la demanda para fines de mes con el inicio de las actividades.

Pese a la confirmación de la ministra de Educación de la Provincia, Susana Benítez, del regreso a las aulas para el primero de marzo, de manera gradual y con todos los protocolos sanitarios, la mayoría de los papás desconocen del cronograma de asistencias de los alumnos y están a la espera de obtener más información por parte de las escuelas.

En este sentido, los negocios relacionados a la venta de uniformes escolares, ante la posibilidad de tener expectativas por posibles comercializaciones, se encuentran en un estado de desconcierto por la falta de certezas y crecen las dudas en los tutores a la hora de adquirir la vestimenta.

"Estamos con más incertidumbre por el momento, hasta que no sepamos bien cómo comenzarán y de quiénes van a hacer", afirmó Diana, vendedora de una casa de ropa escolar de la ciudad, en diálogo con El Libertador.

Por lo tanto, desde el local aseguraron que no presentan demanda en ninguna prenda, y ante la indecisión, sostienen que los padres no van a salir a comprar hasta fin de mes, cuando los colegios notifiquen más al respecto de la modalidad a implementar.

CAUTELA

Además, la vendedora recordó la temporada pasada, con el inicio de las clases, y la suspensión a las semanas por el avance de la pandemia, donde ejemplificó que "algunos que tuvieron chicos en jardín el año pasado, y ahora van a primer año, usaron sólo una semana el uniforme y quedó guardado prácticamente como nuevo", y reafirmó que "lo mismo pasó con aquellos que pasaron a otra etapa, que terminó el primario vía Zoom y ahora tienen el secundario".

También destacó que algunos tutores, para diciembre, compraron algunas prendas, la cual detalló que "fue solamente la parte de arriba, sea chomba o remera porque le habían dicho que iban a tener clases vía Zoom y le iban a pedir que estén uniformados, y se entiende porque a fin de año fue una cosa y ahora todos estamos esperando a ver qué va a pasar, si van a iniciar, si no lo van a hacer".

INCREMENTO EN EL VALOR

Por los índices inflacionarios, en el rubro también se vieron perjudicados en el costo de los materiales y aclaró que "el tema precios depende de la inflación. Obviamente, la empresa absorbe al máximo, pero si se aumenta un 5 o un 20 por ciento, se tiene que aumentar sino es imposible de sostenerse", y advirtió que "va aumentando paulatinamente y depende del costo de la tela, el precio que entra, que se va modificando".

LISTADO DE PRECIOS

En el lugar se pueden encontrar pantalones desde los dos mil pesos, hasta los 2.800 los talles más grandes. Además, las corbatas rondan en los 500 pesos y el guardapolvo en los 2.300 pesos.

En continuación, las chombas van de 1.400 a 1.900 pesos los talles más grandes, y sobre la variación, Diana afirmó que "las chombas que son blancas tienen un precio, y hay de color, que tienen otro precio. Lo mismo pasa con las remeras".