Comerciantes correntinos comenzaron a advertir que los proveedores redujeron la cantidad de productos que distribuyen en esta Capital como consecuencia de las especulaciones de precios desatadas por la permanente suba del dólar en el país.
“Todavía tenemos stock y no hay desabastecimiento, pero fue notorio cómo los proveedores comenzaron a retacearnos los productos la semana pasada con la corrida del dólar”, dijo un comerciante a Corrienteshoy.com.
No hay un precio de referencia estable si el dólar sube todos los días como lo viene haciendo durante la últimas dos semanas, hasta cerrar hoy en 22,80 pesos para la venta, mientras que al mediodía había llegado a 23,40, según el Banco Nación.
Cómo fijar un precio si el dólar subió este martes 1,10 pesos en relación con el día anterior y a las 15 retrocedió 60 centavos; este miércoles no sabe a cuánto cotizará en los primeros minutos del horario bancario.
No saben cuánto subir cada dos o tres días y, desde el viernes pasado, decidieron mantener en stock aquellos productos que tienen largo vencimiento, por lo que la inestabilidad también puede perjudicar a los comerciantes que no actualizan los costos al mismo tiempo.
Así lo explicaron a Corrienteshoy.com comerciantes del centro correntino que mencionaron algunos ejemplos: es el caso de una conocida empresa multinacional que produce, importa y vende productos bajo el nombre de 400 marcas, desde mayonesas hasta artículos de limpieza, higiene personal y perfumería.
También, se observó en supermercados correntinos que en el caso de los lácteos quedaron solo los de segundas marcas, los más baratos, y muy poco de aquellos de primera marca que tienen mayor incidencia en el costo de la canasta de alimentos.
Además de los supermercados y cadenas de kioscos, los que están complicados en Corrientes y gran parte del NEA son los corralones y ferreterías: el precio de los metales está directamente atado al dólar por lo que los precios en el mostrador aumentan dos veces por semana y las grandes distribuidoras dan señales de desabastecimiento.
Es el caso de la venta de chapas, hierro, aluminio y productos de acero, así como materiales para electricidad y plomería, los que más complicados están. Sin dudas, el rubro construcción y ferretería ayudará a elevar también el índice de inflación de mayo de 2018.
Si el peso argentino se devaluó 24 por ciento en los primeros cinco meses del año, es casi seguro que los materiales de la construcción subirán en la misma medida, pero el inconveniente está en poder fijar costos diarios por la inestabilidad cambiaria.
La situación complicó a todos los comercios que deben revisar sus precios diariamente de acuerdo a los distribuidores como Acindar y Siderar, entre otros.