El Gobierno logró aprobar la reforma previsional luego una larga discusión en el recinto de sesiones de Diputados, en medio de un clima enrarecido por la violencia. El oficialismo contó con el apoyo de algunos gobernadores peronistas y pudo convertir en ley un cambio en la fórmula de movilidad jubilatoria. Esta norma se presenta como un ahorro para las arcas públicas estimado en $100.000 millones en pos del  declamado objetivo del equipo económico de reducir el déficit fiscal.





Lo cierto es que desde marzo de 2018 el haber jubilatorio mínimo bruto -sin los descuentos- que cobra más de la mitad de los 6 millones de los jubilados y pensionados será de $7246 a $7623, lo que equivale a un incremento a 377 pesos brutos, que  representarán un alza de poco más de 322 pesos.

 



En tanto, la Asignación Universal por Hijo (AUH) subirá de $1412 a $1485, es decir, apenas un incremento en bruto de $73, que de bolsillo son sólo $50.

 

La iniciativa que impulsó el Gobierno implica que las jubilaciones se calcularán por el índice de inflación, lo que implica un cambio en la actual fórmula de actualización.

 

¿CÓMO SE CALCULARÁ EL AUMENTO?



La nueva normativa aplicará una movilidad trimestral en los meses de marzo, junio, septiembre y diciembre de cada año calendario. El primer aumento se basará en la inflación de julio-septiembre de este año. Luego, en junio de 2018 se ajustará por la inflación de octubre a diciembre de 2017, más un 5% de la variación porcentual real del Producto Bruto Interno. Es decir, utilizando un ejemplo para sumar claridad, si la inflación del cuarto trimestre de este año fuese del 4,5% y el crecimiento anual del 4%, el plus por PBI sería de 0,2 puntos y el aumento total sería del 4,7%.

 

De este modo, recién en junio de 2018 los beneficiarios de las prestaciones recibirán la inflación del cuarto trimestre de 2017.

 

La actual fórmula indicaba que en marzo de 2018 las prestaciones deberían aumentar por las variables -salario/recaudación- del segundo trimestre de este año, lo que hubiese determinado una suba del 12%, es decir, un aumento mayor que el estipulado con la reforma.