La Justicia halló responsable al sargento José Ramón Miño por provocarle la muerte a Rubén “Betito” Franco durante una fiesta de cumpleaños, en septiembre del 2017.

El Tribunal Oral Penal de Mercedes condenó ayer a 3 años de prisión al sargento de policía José Ramón Miño, por la muerte de Rubén Osvaldo Franco (19), alias “Betito”, ocurrida en septiembre de 2017, en las afueras del Club San Lorenzo de aquella ciudad.

El tribunal halló al efectivo responsable por el ataque que derivó en la muerte de Franco.

Además, los jueces hicieron lugar a la acción civil instaurada, condenando a José Miño y en acción solidaria al Estado provincial, al pago de $4,9 millones dentro de 10 días de quedar firme la condena a Antonia Viviana Martínez, madre del joven.

Tal como se publicó por este medio, previo a la condena conocida ayer, con anterioridad se había declarado la responsabilidad penal del imputado.

El abogado querellante, José Sebastián Alegre, destacó que el caso llegó a juicio con la carátula “homicidio preterintencional y abuso de autoridad en concurso ideal”, donde el suboficial aparece como único responsable. Cabe señalar que primeramente habían demorado a otro efectivo, pero con el avance de la investigación fue apartado de la esfera de la Justicia.

El homicidio ocurrió entre la noche del sábado 16 y la madrugada del domingo 17 de septiembre de 2017, en las inmediaciones del Club San Lorenzo de Mercedes, donde se realizaba una fiesta de 15 años.

Posteriormente, la autopsia médico legal determinó que el joven falleció por traumatismo de cráneo encefálico al ser golpeado con un objeto romo y duro, lo cual derivó en su muerte por “hemorragia ventricular y edema cerebral”.