Al sostener hoy que la pauta salarial del 20 por ciento anual en la Provincia no está cerrada para lo que resta del año, el gobernador Gustavo Valdés confirmó el anticipo de Corrienteshoy.com en cuanto a que su Gobierno no confía en el índice de inflación del 15 por ciento anual que proyecta la administración de Mauricio Macri.

 

Pese a ser un gobernador aliado de la Casa Rosada, Valdés tiene dos razones de peso para no hacerle caso a Macri y para avisarles a los trabajadores del Estado correntino que el 20 por ciento anual, ya anunciado en tres cuotas, podría subir hacia fin de año: la falta de credibilidad en la inflación que anuncia la Nación y el golpe de los tarifazos en la economía real.

 

El 20 de marzo pasado, Corrienteshoy.com informó que el equipo de Valdés aconsejó dar un 20 por ciento al considerar que no es creíble que inflación cerrará en 2018 por debajo de ese porcentaje (mucho menos será un 15%) y que, incluso, por superarlo.

 

Como este medio ya informó en la mañana de este viernes, desde Mendoza, Valdés dijo que no está cerrada la política salarial dejando en claro que puede reabrir para subir el porcentaje, aunque dijo que él se preocupará en avanzar siempre y cuando no se complique la situación fiscal de la Provincia.

 

Fuentes de la Gobernación indicaron hoy que durante el último trimestre del año, entre octubre y noviembre, la administración tendrá que rever la pauta salarial y la misma podría llegar al 25 por ciento anual en caso de que la inflación avance.

 

Pero más allá de la escasa credibilidad del índice del 15% que promete Macri, lo cierto es que el Gobierno siente que la economía de los trabajadores está siendo seriamente afectado por los tarifazos en la energía eléctrica y otros servicios públicos.



 

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La decisión del gobernador de Corrientes, Gustavo Valdés, de confirmar un 20 por ciento de aumento salarial anual, en tres cuotas, fue motivada porque su equipo económico cree que la inflación de 2018 estará por encima de ese porcentaje, contrario a lo que calcula y recomienda el Gobierno de Mauricio Macri.

 

En su afán de bajar el gasto público con menores aumentos de salarios, el Gobierno de Macri le pidió en diciembre pasado a los gobernadores y ministros provinciales que no se pasen del 15 por ciento de incremento en sus partidas salariales. Lo hizo cuando negoció con los mandatarios del interior la aprobación del Pacto Fiscal en el Congreso. De hecho, María Eugenia Vidal tiene un arduo conflicto en la provincia de Buenos Aires porque los estatales (entre ellos, docentes) rechazan el 12 por ciento anual que pretende dar.

 

La decisión del gobernador correntino, aliado del Gobierno nacional en Cambiemos, significa que en una provincia como Corrientes no solo las autoridades descreen de las proyecciones de inflación de Macri, sino que, además, sienten el rechazo generalizado de la gente por los tarifazos en la energía eléctrica y otros servicios públicos, así como las incesantes subas en alimentos y vestimenta.

 

El 20 por ciento para los empleados públicos de Corrientes se pagará en tres cuotas: 10 en marzo, 5 en julio y otro 5% en octubre. Pero la falta de credibilidad en la proyección de una inflación del 15 por ciento anual que hace el Gobierno de Macri, deja en claro que Valdés manejará la posibilidad de anunciar otro incremento entre noviembre y diciembre para aproximarse al 25 por ciento.

 

Así lo estimaron este martes fuentes consultadas por Corrienteshoy.com en el equipo económico de Valdés, horas después de la conferencia de prensa que encabezó el subsecretario de Hacienda, Marcelo Rivas Piasentini, para anunciar la mejora salarial.

 

Fuera de micrófonos, hay una opinión clara entre los funcionarios correntinos. Pese a ser aliados de Macri en Cambiemos, descreen que la inflación se quedará en el 15 por ciento anual y, en tanto, consideran que incluso podría superar el 20 por ciento.

 

¿Por qué los funcionarios correntinos no les creen a Macri? El 20 por ciento anual anunciado este martes para los empleados correntinos se licua con el impacto en el bolsillo de los tarifazos de febrero. Por ejemplo, para el caso de un policía de menor rango, que gana 10,900 pesos en mano, la factura de luz de la DPEC ya se llevó la mitad del 10 por ciento que recibirá en marzo, a fin de mes. La otra mitad del aumento se diluye con los incrementos de este trimestre en el resto de los servicios públicos. En el caso de ese policía, su mejora en bolsillo será en marzo de 1.090 pesos y su salario pasará a 11.990 pesos.

 

De todas maneras, no existe la posibilidad de que Valdés y su equipo económico salga públicamente a revelar que descree del 15 por ciento proyectado por Macri. Es más, ayer en la conferencia de prensa, Rivas Piasentini dijo: “Damos un 20 por ciento, por encima de la inflación”.

 

Las consultoras privadas, algunas cercanas a Cambiemos, ya calculan que para el primer cuatrimestre la inflación acumulada llegará al 8 por ciento y que la anual estará entre el 20 y 24 por ciento.