Los familiares y compañeros del agente de tránsito que murió atropellado le brindaron este lunes una sentida despedida, antes de que su cuerpo sea trasladado al cementerio San Juan Bautista de la ciudad de Corrientes.
Se trata de Ramón Araujo, quien falleció el domingo en inmediaciones al anfiteatro Cocomarola, cuando, por razones que son de investigación, fue embestido por una vehículo de la agencia de seguridad vial.
El hombre salvó a dos compañeras empujándolas a la vereda para evitar que les pasara algo.
Tras ser velado en una sala de avenida Independencia, el coche fúnebre fue escoltado por sus compañeros del área y se dirigió hasta la avenida Artigas, donde se encuentra la Dirección de Tránsito Municipal.
Al llegar, entre aplausos y tristeza fue despedido por los trabajadores municipales, quienes se mostraron consternados por la situación.
Fuentes municipales señalaron este lunes que el accidente se encuentra en etapa de investigación y ratificaron que el vehículo se encontraba en condiciones, tal como lo señaló el director de Tránsito, Ricardo García a El Litoral.
“El perito de la policía confirmó que el freno de mano estaba puesto. Fue un accidente”, había afirmado García ante las versiones que indicaban que el vehículo municipal no tenía puesto el freno de manos.