El Ministerio de Salud Pública, Ricardo Cardozo, presentó los logros de gestión alcanzados particularmente en salud materno-infantil, destacando que es uno de los principales ejes para el desarrollo óptimo de la población y la calidad de vida.
En contacto con el móvil de MITRE, de manera preliminar adelantaron que este año la mortalidad infantil se redujo en un 21% en comparación con los datos recabados en la misma fecha durante el 2016.
“Hace dos años cuando asumimos el cargo, teníamos un porcentaje de 16 por mil y hoy estamos en 10,5 por mil. Trabajamos intensamente y conformamos una red para detectar y tratar cualquier caso crítico que se pueda presentar. Hemos fortalecidos todas los centro de neonatales de la provincia”, comentó.
Como resultados estadísticos destacaron el hecho de que en el 2016 la tasa de mortalidad infantil descendió un 56% respecto al 2015. En lo que respecta a datos actualizados, mientras las imágenes mostraban que la mortalidad se redujo un 21%, entre el 2016 (con 211 casos) al 2017 (con 168 casos); la doctora Ropelato detallaba: “Son números absolutos comparativamente nos sitúa en un 2017 con una reducción del 21% respecto al 2016 para la misma fecha. Creemos que son datos provisorios, buenos pero habrá que esperar datos definitivos”.
Por su parte, el ministro de Salud destacó las cifras como “un logro histórico para la provincia de Corrientes”. A continuación indicó: “Queremos relanzar el programa 1.000 días para siempre, un proyecto heredado de Dindart pero que fue reformulado con la condición de fortalecerlo. No sólo en la distribución de alimentos, sino también en acciones para la detección precoz de embarazadas (fundamentalmente adolescentes), asegurar los controles, cubrir el déficit en vitaminas, otorgar condiciones para el parto seguro y orientación en los primeros 1.000 días”.