Monseñor Ricardo Oscar Faifer, obispo emérito, presidió la misa de Nochebuena en la Iglesia Catedral Nuestra Señora del Rosario de Goya, ante un templo colmado de feligreses y colocó la imagen del Niño Jesús en el pesebre, que fue presentada por una familia de la comunidad. El prelado expresó sus deseos de “bien, de paz, de alegría y de esperanza… ¡Sobre todo de esperanza en este difícil momento de nuestra Patria”.
En la homilía el obispo emérito, remarco ¡Qué bueno es estar congregados para que juntos como hermanos celebrar esta gran buena noticia que es alegría para todos: ¡hoy nos ha nacido el Mesías, el Señor!” comenzó el obispo.
“Hermanos, qué cosa maravillosa, lo que celebramos en la fe. Quisiéramos hoy pedir hoy a la Virgen y a José que nos presten su mirada de pequeños, de confiados para acércanos en la fe a este salvador Jesús, por eso, lo adoramos, contemplamos, quedamos admirados y expresamos nuestra acción de gracias y le pedimos la gracia de que nos tomemos en serio el Evangelio del Señor y el compromiso de vivir como hermanos, en una fraternidad que no sea solo de palabras” dijo el obispo emérito.
Invito a “hacer un gran silencio y dejar que nos hable el Señor, en su ternura, en sentir que palpita el corazón de Dios junto a nosotros y, en la fe nosotros sabemos que ese Niño es verdaderamente Dios con nosotros”.
“Jesús nació tan pobre, pero tan lleno de luz y de amor. María lo envolvió en pañales y lo acostó en el Pesebre” recordó.
Afirmó que “Jesús vivo, viene a hacer visible, patente e histórica la presencia de Dios” porque “Él es verdaderamente Dios, el Hijo eterno del Padre. Nosotros sabemos por revelación que Dios es amor, es Padre, Hijo y Espíritu Santo”.
Remarcó seguidamente: “¡Cómo se manifiesta la gloria de Dios en esta pequeñez y en esta pobreza! Y, es esto lo que celebramos en este día, esta cercanía. Celebramos la seguridad de este amor tan inmenso del Señor”.
“Conocer y creer en este amor inmenso de Dios con nosotros, nos serena, nos da seguridad y nos da esperanza” enfatizó monseñor Ricardo Faifer.
Monseñor Faifer saludo a la feligresía señalando: “Que este saludo de Navidad y Año Nuevo sea portador del más bello deseo de bien, de paz, de alegría y de esperanza… ¡Sobre todo de esperanza en este difícil momento de nuestra Patria… Porque nuestra fe nos asegura que Jesús está vivo a nuestro lado cada día, para iluminarnos, para fortalecernos, para liberarnos”.-