Hay momentos cruciales, muchas veces son imperceptibles debido a la vorágine de la vida misma. Esos momentos, también marcados por circunstancias, son los que generan nuevas perspectivas hacia un futuro desconocido, pero es la herramienta para salir de un presente que nos atosiga.


En los últimos días tanto la Ciudad de Corrientes como todo el interior de nuestra amada provincia, soportaron colapsos energéticos. La luz siempre se corta en Corrientes: o por elevadas temperaturas o por lluvias.


Me contaron de manera alarmada que una de esas interrupciones en el servicio energético alcanzó el servicio de neonatología del Hospital Vidal. Recordé entonces el caso de Jonathan Herrera en Alvear hace dos semanas. Hecho que no está esclarecido y que tiene involucrados a varios efectivos de la Policía Provincial.


Ese episodio empezó justamente en el hospital provincial en Alvear. El chico llegó allí tras protagonizar un accidente en motocicleta, no lo pudieron atender correctamente porque en ese momento el centro asistencial estaba a oscuras.


Cuando hablo de refundar la provincia, de soñar con una provincia nueva, hablo de estas cuestiones que están tan marcadas en la vida de miles de correntinos que, por eso, se cree que es normal vivir así. Sin servicios esenciales o con la mitad de la población pobre.


Ocurre que nos hicieron creer y convencernos de que vivir así es normal. La normalización como control social.


Pero no es así. Se puede mejorar la calidad de vida, empezar esa misión desde los que más necesitan. De quienes perdieron todo: perdieron lo más importante, la esperanza.


Es por ellos y por las nuevas generaciones que debemos apostar a los cambios y la clave es que sea con todos. Sin nadie afuera de esa idea de que podemos estar mejor.

Lo que viene, vientos nuevos


La conformación de algún nuevo frente electoral que contenga a esos sectores que parecen a simple vista diferentes, tan disímiles que suponen un imposible poder juntarse en un mismo espacio político social.


No es oportunismo. Es una idea que debe cristalizarse en trabajo y fe de poder cambiar lo que nos acontece hace décadas, salir del ostracismo como provincia y como comunidad.


En el medio. En la coyuntura tenemos una pandemia que está por cumplir un año en nuestro país y región en el sur del continente americano. También es otra oportunidad como lo son todas las crisis para agudizar la imaginación y comprender que podemos vivir de otra forma. Que nuestros derechos ciudadanos deben ser respetados.


La distribución de las vacunas contra el Coronavirus es otra clara muestra de todo lo dicho anteriormente. Es una clara muestra de cómo se manejan quienes tienen que tomar decisiones que nos involucran a todos.


Corrientes no llega al 1% de inoculaciones. Nuestros médicos tuvieron que hacer públicamente el pedido para ser vacunados: mucha gente que accedió a la medicina no es personal esencial de salud, por lo general están ligados al poder político.


En una refundación también hablamos de que esas acciones queden en el pasado.