Ocurrió durante un allanamiento, donde incautaron cocaína y dinero en efectivo. Todavía se investiga si los arrestados están vinculados con el ataque a balazos en el que murió el pequeño y otras tres personas resultaron heridas.

Un allanamiento que se realizó este lunes por la noche en Rosario terminó con la detención de tres personas y el hallazgo de un auto. El mismo habría sido el que se utilizó en la balacera que terminó con la vida de Máximo Jerez durante la madrugada del domingo. Además, en las últimas horas otros dos sospechosos quedaron presos. En total, son cinco los acusados.

El fiscal a cargo del caso, Adrián Spelta, encabezó anoche el operativo realizado en una casa del barrio Godoy, donde personal de la Agencia de Investigación Criminal encontró el vehículo Honda Civic negro.

Se trata del primer allanamiento realizado en el marco de la investigación por el crimen del nene de 12 años. En el lugar se detuvieron a dos personas, mientras que una mujer que intentó escaparse y en su huida arrojó un celular en un terreno baldío, fue arrestada en las inmediaciones de la propiedad. Además, esta tarde apresaron a otros dos sospechosos. Hay un sexto sospechoso prófugo.

En el lugar la policía también encontró algunas bolsitas de cocaína y dinero en efectivo, de acuerdo a lo que informó el medio local La Capital.

Cómo fue el crimen de Máximo Jerez en Rosario

El hecho ocurrió cerca de las 2 de la madrugada de este domingo en la intersección de las calles Cabal 1300 bis y pasaje San José. Un grupo de delincuentes atacó a balazos una casa en la que se encontraban los cuatro chiquitos. Los disparos impactaron contra todos ellos y provocaron la muerte de Máximo Jerez.

Además, una nena de 2 años recibió un disparo en el brazo y otros dos menores de 13 años fueron baleados en la boca y en el pecho. Todos debieron ser trasladados al Hospital de niños Zona Norte para ser asistidos.

La policía fue hasta el lugar del ataque y advirtió la presencia de los agresores, que trataron de escapar por los pasillos del asentamiento. Segundos después se inició una persecución que terminó con los delincuentes escapando por los techos del barrio.