Opinión del Lector

Crisis, inflación y dólar enferman al sistema de salud

Si las condiciones de cobertura y abastecimiento no se restablecen y los ingresos de las instituciones no son suficientes para cubrir los costos, el damnificado, como es usual, es el paciente.



En su origen, el sistema de salud argentino y los equipos que lo componen lucían robustos y pujantes, creciendo hasta 2011 a tasas de inversión del 7 por ciento anual, con una cobertura médica única en cuanto a alcance, oportunidad y calidad.

Hoy invade la preocupación por la suspensión del aumento en las cuotas de las prepagas y medicamentos mientras los insumos en dólares aumentaron hasta un 50 por ciento. Desde el sector, advierten que puede haber congelamiento de salarios, aranceles y honorarios médicos.

“Hay cirugías atrasadas, ya que muchos insumos y prótesis son importados. Esto se da, además, en un contexto de poca industria sustitutiva nacional”, explica Marcelo Kaufman, presidente de la Cámara de Entidades de Diagnóstico y Tratamiento Ambulatorio (CEDIM).

El Gobierno Nacional anunció el domingo que suspenderá el aumento a la medicina prepaga por los próximos 90 días para todos aquellos hogares que no superen los $2.000.000 de ingresos mensuales, es decir, cerca del 98% de los usuarios de medicina prepaga. Todavía no se conoce el detalle de cómo se implementará.

Fuentes del sector prepagas aseguran que en un contexto de altísima inflación e incertidumbre “una suspensión transitoria de aumentos no resuelve sino que agrava el problema del financiamiento del sistema de salud”.

Medidas desmedidas para el sector salud

“A diferencia de otros sectores de la economía, los anuncios en la salud privada generan déficit directo, por mayores gastos con la suma fija no remunerativa y menores ingresos por la suspensión del DNU (Decreto de Necesidad y Urgencia) que permitía incrementos que se trasladaban en un 92% automáticamente a las clínicas y sanatorios”, explica el Director General Sanatorio Mater Dei, Enrique Camerlinckx.

Según la Asociación de Clínicas y Sanatorios de la Provincia de Mendoza (Aclisa), los pagos de las prestaciones se producen, como mínimo, a los 90 días de realizadas, por lo que hay sectores que evalúan el traslado de dichos costos al beneficiario de la prestación con el llamado pago de bolsillo, para poder así garantizar la continuidad de la atención médica.

“No vemos, para peor de los males, que ninguna plataforma política tenga conocimiento real de esta situación, y menos que tenga ideas de como cambiar para evitar la irremediable quiebra del sector y consecuente desaparición de profesionales capacitados, porque esta es la verdadera razón que tanto preocupa a la gente acerca de la falta de especialistas... si las clínicas y sanatorios pierden plata, ¿qué médico va a querer ingresar a un sector en riesgo?”, plantea el directivo del sector sanitario.

Ninguna de estas medidas dice que las empresas vayan a recibir alguna compensación tributaria ni de la Seguridad Social. Con los ingresos regulados y controlados y los costos prácticamente liberados, estas nuevas medidas tampoco van a colaborar para mejorar la atención ni a preservar el bolsillo de los usuarios.

Según advierten, con este anuncio, no habrá aumento de aranceles a los sanatorios y centros; tampoco habrá aumento de honorarios profesionales, lo cual profundizará el retraso de lo que cada profesional debe ganar. También, se anticipan problemas gremiales ante la imposibilidad de revisar paritarias.

“Nos han transformado, con cada medida de los últimos años, en financiadores de la salud y NO podemos seguir financiando”, remarca Camerlinckx, que insiste en que se intenta solucionar un problema generando otro con el consecuente desfasaje entre los costos de las prestaciones médicas, honorarios, tratamientos, insumos, etc.

“Desabastecimiento y desfinanciamiento estructural que ahora se profundiza configuran un panorama complejo y no sustentable para un sector esencial, que atiende la salud de 7 de cada 10 argentinos”, afirmó el presidente de la Asociación de Clínicas, Sanatorios y Hospitales Privados de la República Argentina, ADECRA, Jorge Cherro: “Esperamos que prontamente toda esta problemática tenga algún principio de solución”.

El Estado, con el accionar de sus distintos poderes, es responsable de esta situación, de la que fue advertido innumerable cantidad de veces. Hoy solo es necesario detener el deterioro y reconstruir sobre lo muy bueno que el sistema tiene. Claramente, al no entender el sector, se proponen medidas injustas.

Autor: Guillermo Lobo|

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