El dato se desprende de un informe elaborado por la Municipalidad de Rosario que es querellante ante la justicia de Entre Ríos en la investigación por las quemas intencionales.
La Municipalidad de Rosario detectó 10 puntos donde se iniciaron hasta 59 incendios en dos años en las islas del Delta del Paraná. El dato surge de un informe que llevaron a cabo para aportar pruebas a la justicia de Entre Ríos en la causa de la que son querellantes.
“Seamos claros: ninguna de las actividades históricas de las islas genera fuego cada dos meses. Alguien está haciendo esto con otros intereses”, escribió Pablo Javkin, el intendente de esa ciudad, al publicar el dato en su cuenta de Twitter.
La ciudad de Rosario estuvo reclamando en los últimos días por el humo insoportable que llega a la ciudad por las quemas en el Delta y que vuelve el aire irrespirable. Solo este año ya se perdieron 100 mil hectáreas de este humedal.
Qué dice el informe sobre los incendios en el Delta
El informe se dispuso a analizar los focos iniciados el 7 de agosto y pudo constatar que la superficie afectada es la misma que en ocasiones anteriores, tomando cómo referencia el periodo entre el 1 de enero del 2020 y el 31 de julio de 2022.
El foco donde se detectaron las reiteraciones está ubicado frente a la ciudad de Rosario. Comenzó 20 kilómetros al Este y avanzó a lo largo de 10 km en dirección a la ciudad dada la intensidad y dirección del viento registrado en ese momento (47 km dirección Este/Sudeste).
El informe también indica: “en el periodo comprendido entre los días 9 y 13 de julio de 2022, identificamos ocho focos activos. Tras analizar y entrecruzar los datos del periodo entre el 1 de enero del 2020 y el 30 de junio de 2022, se observa que las superficies afectadas son las mismas en reiteradas ocasiones”.
Así, queda en evidencia que se trata de quemas intencionales. Por el momento, no hay condenados por estos hechos pese a que ocurren desde hace años.
La ley de Humedales, una iniciativa clave que sigue trabada en el Congreso
Los humedales son áreas que están en constante inundación. Funcionan como grandes esponjas naturales que absorben y retienen agua. También son grandes reservorios de dióxido de carbono. Por eso, cuando se queman u obstruyen, se expulsa al ambiente, empeorando la situación. El Delta del Paraná es un gran humedal que está quemándose por incendios intencionales.
La ley de Humedales, que perdió estado parlamentario el año pasado cuando había recibido media sanción, prevé un inventario de estos ecosistemas y una protección de los mismos. Representan alrededor del 22% del territorio nacional. Hoy está paralizada en el Congreso.
El diputado nacional Enrique Estévez, del Bloque Socialista, presentó en el Congreso nacional un proyecto de ley para declarar la emergencia ambiental en el delta del río Paraná. También busca crear un Programa de Recomposición Ambiental y la ejecución de un fondo específico, que permitan acciones concretas para combatir los incendios y trabajar en la prevención con mayor infraestructura.
En línea con lo que señaló Javkin, Estévez dijo que los incendios son en lugares predecibles. “Lamentablemente, los anuncios que han hecho tanto desde el Gobierno Nacional como el Gobierno de la provincia de Santa Fe no tuvieron efecto. No hay un interés real para esta catástrofe”, señaló.