A cinco días del derrumbe del hotel Dubrovnik en Villa Gesell, que hasta el momento dejó un saldo de tres fallecidos y cinco desaparecidos, 300 bomberos de distintas partes de la provincia de Buenos Aires se sumaron al intenso operativo de rescate para remover los escombros y dar con el paradero de quienes estaban en el lugar en el momento del desastre y aún no fueron hallados.

«Hoy a la mañana encontramos muchas pertenencias de dos de las víctimas, que quiere decir que llegamos a las habitaciones que utilizaban. En esas habitaciones todavía no los encontramos», anticipó Javier Alonso, ministro de seguridad de la provincia de Buenos Aires, en referencia a dos de las cinco personas que son buscadas entre los restos de la edificación de diez pisos que se desplomó el martes 29 de octubre.

A su vez, al detallar cómo son los pasos a seguir, el funcionario explicó: «Nos queda llegar al espacio de los pasillos, que es lo que estamos haciendo ahora. El hall y los pasillos que conectan los departamentos de las víctimas con la escalera».

En ese sentido, agregó: «Estamos buscando en esos lugares. Estamos muy avanzados en la zona donde estaban los chicos de Mar del Plata, que es la estructura que colapsó sobre el edificio de al lado».

«Ahí teníamos mucho peligro de derrumbe, se había generado un hueco y pusimos perros que llegaron abajo. También pusimos bomberos, pero en un momento esa estructura se movió y los ingenieros decidieron evitar el trabajo en ese hueco. De ahí hemos sacado casi cuatro pisos»; finalizó.

Por otra parte, en conferencia de prensa, el Director de Defensa Civil bonaerense, Fabián García, confirmó que las tareas de rescate no se detendrán, ni siquiera ante condiciones climáticas adversas: «Los bomberos estarán abocados a la remoción de escombros de forma manual, una de las labores que exige mayor esfuerzo físico».

Para resguardar el bienestar de los bomberos y rescatistas, Villa Gesell puso a disposición el Polideportivo Municipal y el Centro Cultural Pipach, mientras que los vecinos y vecinas ofrecieron sus hogares para alojarlos, en caso de ser necesario.

El sábado por la tarde se dio a conocer la aparición del cuerpo de Nahuel Stefanic, el sobrino de Rosa, exdueña de la propiedad. Es el tercer fallecido que tiene hasta el momento la tragedia.

Horas después, la causa tuvo otra novedad: la Policía detuvo a uno de los arquitectos a cargo de la obra que se estaba realizando en el establecimiento, sin autorización municipal. Se trata de Jorge Bonavita, de 55 años, y quien también se desempeña como bombero voluntario en la localidad de Madariaga.

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Bonavita fue acusado del delito de «estrago culposo agravado», que prevé una pena de hasta cinco años de prisión, y quedó a disposición de la Justicia para ser interrogado.

Con este arquitecto, ya son seis los detenidos en la causa: Sergio Paco Laura, Celso Paco Pérez, Miguel Choque Juchani, Diego González y Rubén Taquichiri.