La inteligencia artificial en sus distintas expresiones, el advenimiento de la computación cuántica y los diversos desarrollos de blockchain son algunos ejemplos de tecnologías disruptivas que impactan significativamente en la morfología del sistema financiero. Gobierno, actores privados, sociedad y universidades tenemos el enorme desafío de gestionar estas temáticas de corto plazo sin dejar de prepararnos para los nuevos paradigmas que se avecinan.



El advenimiento de tecnologías innovadoras y disruptivas que se está experimentando a nivel mundial hace que los plazos de adaptación de los distintos participantes en el sistema financiero se acorten cada vez más. En el escenario actual de urgencias constantes que vivimos en Argentina plantearnos problemas y cuestiones a afrontar para escenarios de mediano y largo plazo, pareciera un absurdo pero resulta un imperativo que debemos enfrentar.



Veamos sólo algunas de estas innovaciones, y el impacto que tienen en el sistema financiero

Inteligencia Artificial (IA) en el campo financiero

Recientemente todos hemos quedado fascinados con la aparición de programas de IA (Inteligencia Artificial) generativa, como el conocido chatGPT. Pero el campo de la IA es mucho más amplio de lo que nos muestran estos desarrollos.



Una de las múltiples aplicaciones de IA demandada significativamente en el mundo financiero actual, es la de Aprendizaje de Máquina (Machine Learning). Estos programas nos facilitan, por medio de técnicas sofisticadas de estadística (regresión lineal y logística, árboles de decisión, random forests, k-nearest, ...) crear modelos que son “entrenados” con cantidades masivas de datos, y nos permiten: perfeccionar servicios a los clientes, gerenciar portafolios de inversiones, detectar fraudes, realizar trading algorítmicos, evaluar riesgos y carteras de créditos, entre otros usos.

IA + Computación cuántica (IA con esteroides)

El problema de la inmediatez tecnológica es que cuando parece que ya estamos entrando en la fase de maduración de una tecnología, nos sacude la próxima ola de evolución. En este caso, hablamos de las técnicas de QML – Quantum Machine Learning (aprendizaje de máquina cuántico).



Actualmente se está trabajando a pasos acelerados para conseguir el desarrollo de un procesador cuántico estable, por el que compiten principalmente China y USA. Paralelamente se desarrollan nuevos modelos de Machine Learning basados en el gigantesco potencial de cómputo y el paralelismo de las computadoras cuánticas.



¿Cuál será el impacto esperado en el campo financiero y de los negocios por la utilización del QML?



Se espera que las QML permitan potenciar aún más la optimización de carteras, la selección de activos financieros con minimización de riesgo, mejora en modelos de comportamiento de mercados, y lograr simulaciones de escenarios con más certeza predictiva.



Pero estos beneficios también conllevan riesgos.



Recientemente el BIS (Bank International of Settlements, conocido como Banca de Basilea), publicó una serie de consideraciones y advertencias en referencia a la computación cuántica y su impacto en el sector bancario (BIS – Project LEAP, junio 2023). En ese documento se hace mención del interés de parte del sector bancario de utilizar algoritmos cuánticos para incrementar la velocidad de simulaciones Monte Carlo. Pero, al mismo tiempo se advierte que “un uso hostil de estos datos podría tener un impacto disruptivo en importantes servicios financieros, … con un efecto dañino en la estabilidad financiera”.



La consecuencia de esta tentativa de manipulación hostil de datos para generar inestabilidad financiera es un punto medular a considerar para poder elaborar respuestas o estrategias defensivas, en especial en países con mercados financieros poco desarrollados como el nuestro.

Computación cuántica

Dentro de este escenario, posiblemente el desafío más relevante que presenta el advenimiento de la computación cuántica no es el de crear inestabilidad financiera, sino la utilización del extraordinario poder de cómputos de estos procesadores para quebrar algoritmos criptográficos sobre los que están montadas las infraestructuras de seguridad de bancos, mercados, empresas y organizaciones.



En el documento mencionado anteriormente el BIS no solamente recomienda que los bancos comiencen a implementar planes para realizar estas migraciones de sistemas de seguridad, sino que alerta sobre las estrategias llamadas “cosechar ahora, desencriptar después”. Esta frase hace referencia a la sospecha que organizaciones, grupos de interés o incluso países están almacenando grandes cantidades de información encriptada que se transmite hoy por Internet, en forma segura, con el objetivo de desencriptarla en el futuro, cuando se cuente con procesadores cuánticos. De esa manera podrían recabar información sensible que hoy usamos despreocupadamente por contar con la certeza de que resulta invulnerable.

Al futuro y más allá

Hay dos desarrollos adicionales que merecen destacarse sobre los que se está trabajando (por ahora solo teóricamente) en el campo de la computación cuántica.



Uno de ellos, el algoritmo BB84 que permitiría “asegurar” un canal de transmisión de información ante la sola “observación” de esta, y el otro el “entrelazamiento” de estados cuánticos que podría generar una nueva forma de comunicación. Nada menos que una red que podría sustituir a la infraestructura de Internet actual !!!



¿ Cuáles serían algunas de las consecuencias para el sector financiero?



Un aseguramiento de la confidencialidad de la información como jamás imaginamos, y la potencial sustitución de los canales de comunicación que utilizamos en la actualidad, como el sistema SWIFT de transferencias bancarias, el cableado de fibra óptica intercontinental, comunicación satelital (donde orbitan empresas como Starlink), y la enumeración sigue…



Pero el impacto de esta próxima ola se ubica en un horizonte más lejano, aunque no por mucho tiempo.

Blockchain y CBDC - Monedas Digitales de Bancos Centrales

Si hablamos de nuestro radar tecnológico en el más corto plazo (y hasta casi inmediato) tenemos que considerar la tecnología de Blockchain y una de sus aplicaciones denominada CBDC - Monedas Digitales de Bancos Centrales .



El 3 de enero de 2009 se registró el “bloque génesis”, el puntapié inicial del Bitcoin, nave insignia del mundo cripto. Desde ese momento la tecnología de Blockchain que da vida a las criptomonedas y a un vibrante ecosistema, ha evolucionado incesantemente, llegando a convertirse en la infraestructura tecnológica en que se edifica el ecosistema DeFi (Finanzas Descentralizadas), y la mayoría de las iniciativas de CBDC en el mundo.



A febrero de 2024, la organización CBDC Tracker.org tiene rankeadas iniciativas de CBDC clasificadas de la siguiente forma: 4 lanzamientos, 20 pruebas piloto, 26 en fase de prueba de conceptos, 105 Bancos Centrales en fase de investigación/análisis. Esto parece indicar que las CBDC ya pasaron el “punto de no retorno”. En especial considerando que China ya ha expresado su intención de utilizar el “Yuan digital” para gestionar su comercio internacional.



En referencia a esta innovación tecnológica, no podemos obviar la mención del DREX – Real Digital, la CBDC de Brasil, nuestro principal socio comercial y estratégico en la región.



El Banco Central de Brasil (BACEN) está llevando a cabo las pruebas iniciales para integrar la plataforma de DREX con los sistemas de bancos, incorporando otros usos como por ejemplo los sistemas que gestionan títulos emitidos por parte del Tesoro de Brasil. La tecnología sobre la que se están llevando a cabo estas pruebas de DREX utiliza la plataforma Hyperledger Besu, una variante de la Blockchain Ethereum.



¿Qué es lo importante en la elección de esta tecnología?



Que deja la puerta abierta para compatibilizar el sistema financiero tradicional con la mayor parte del ecosistema DeFi, que cuenta con una inmensa variedad de instrumentos financieros digitales. Estos van desde criptomonedas, pasando por Stablecoins (criptomonedas estables), NFT (tokens no fungibles), RWA (tokens de activos de mundo real) y llegando a los complejos activos financieros sintéticos digitales. De hecho, en junio del año pasado, entró en vigor en Brasil la nueva ley de activos digitales, designando al BACEN como entidad encargada de su regulación y monitoreo.



El desarrollo de una CBDC no implica necesariamente una mayor emisión de dinero. Pero negarle al Banco Central este instrumento parece ir a contramano de la integración que se prevé en corto plazo habrá de las monedas digitales, como por ejemplo el reciente anuncio de los BRICS de utilizar las suyas para direccionar su comercio internacional.

Algunas reflexiones finales

Las técnicas innovadoras de IA usadas para realizar complejos análisis de datos, el advenimiento de la computación cuántica con su inmensa potencialidad, el avasallante empuje de la tecnología de Blockchain en la actividad financiera y la explosión de monedas digitales nos lleva a reflexionar sobre el rol de los distintos actores involucrados, desarrolladores y reguladores, que deben brindar nuevas e innovadoras soluciones en el alcance de sus responsabilidades.



Más que nunca se hace imperioso generar una sinergia entre gobierno, actores privados y academia para debatir, analizar y elaborar pasos concretos frente al enorme desafío que plantean estas tecnologías.



Profesor de Tecnología de la Información. Universidad Nacional Rosario