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Dimite un asesor sueco de Seguridad Nacional por 'olvidar' documentos secretos en un hotel

Los descubrió el personal de limpieza del hotel: un fajo de documentos olvidados en la caja de seguridad de una sala de reuniones que fue entregado en la recepción. Sin sospechar la importancia de los documentos ni el requisito especial de confidencialidad que recaía sobre ellos, el personal de recepción intentó contactar con varios clientes que podían ser los propietarios. Pero, debido precisamente a que se trataba de documentos clasificados, los funcionarios suecos contactados por el hotel no conocían ni los documentos ni su contenido, por lo que se desentendían del asunto.Las preguntas de los solícitos recepcionistas, sin embargo, despertaron preguntas en el Ministerio de Defensa, que llegó a sus propias conclusiones. El asesor de seguridad nacional Henrik Landerholm , que había \'olvidado\' los documentos en el hotel, ha presentado su renuncia. Uno de sus colegas se ha encargado personalmente de recoger los documentos.La renuncia de Landerholm, de 61 años, se ha producido después de que fuese informado del inicio de investigaciones policiales en su contra y de hablar sobre el asunto personalmente con el primer ministro sueco, Ulf Kristersson . En la carta de dimisión ha alegado que ya no puede cumplir con sus «deberes profesionales» en estas circunstancias.Noticia Relacionada estandar Si La OTAN desplegará buques no tripulados en el Báltico Rosalía Sánchez | Corresponsal en Berlín El objetivo es crear una extensa red de vigilancia que combine vídeo, datos de radar y sistemas de evaluación. Con ello se pretende proporcionar a los distintos actores una información más rápida para tomar medidas adicionalesNo es el primer incidente vergonzoso que protagoniza, según el periódico \'Dagens Nyheter\'. El exembajador y rector de la Universidad del Ejército sueco ya olvidó su teléfono móvil en la embajada húngara, en diciembre de 2022, precisamente cuando Hungría estaba bloqueando la solicitud de ingreso de Suecia en la OTAN. Y en 2024, según \'Aftonbladet\', Landerholm pasó un fin de semana con su pareja en Berlín y facturó alrededor de 800 euros en gastos de viaje a expensas de los contribuyentes. Su nombramiento como asesor de seguridad se había atribuido por algunos medios suecos al hecho de que es amigo cercano del primer ministro Kristersson desde la infancia, pero esto no ha evitado que acepte su dimisión.La investigación, a pesar de la renuncia, sigue su curso. En el actual contexto de seguridad, los olvidos y descuidos son sospechosos de espionaje . Especialmente desde la entrada de Suecia en la OTAN y la expulsión de espías y personal diplomático de muchos países europeos, los servicios secretos rusos se esfuerzan por captar funcionarios y personal de seguridad en Suecia. Las captaciones se centran en personas de edad cercana a la jubilación, que tienen mucho que ganar y ya poco que perder en su carrera profesional.Recientemente ha sido acusado de espionaje Sergey Skvortsov , de 60 años, sospechoso de «graves actividades ilegales de inteligencia contra Suecia y contra una potencia extranjera» que el fiscal Henrik Olin ha identificado como Estados Unidos. Según el pliego de cargos, «en secreto y/o con el uso de medios fraudulentos realizó actividades para el Estado ruso con el objetivo de adquirir información sobre condiciones cuya divulgación a una potencia extranjera podría poner en peligro la seguridad de Suecia». «Formaba parte de una red», precisó el fiscal, «utilizaba su negocio de importación y exportación para obtener tecnología ilícitamente y entregársela al servicio de inteligencia militar ruso GRU».También han sido detenidos Peyman Kia y su hermano Payam , ciudadanos suecos nacidos en Irán, por estar pasando información a la inteligencia rusa. Peyman Kia había trabajado en el servicio de inteligencia militar MUST, incluida la Oficina Especial de Inteligencia, y para el Servicio de Seguridad Sueco. También a través de la extensión de la iglesia ortodoxa, Rusia se hace con nuevas conexiones de información. La iglesia ortodoxa rusa recientemente construida en la ciudad sueca de Västerås, inocente lugar de culto para muchos fieles, es vista por la inteligencia sueca como una amenaza potencial para la seguridad nacional, por ejemplo.

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