Son más de 100 y, según advirtió una especialista, esto podría continuar evolucionando en otros animales, lo que constituye una amenaza pandémica permanente.
Dinamarca es el mayor exportador mundial de piel de visón y a principio de noviembre había anunciado que sacrificarían a 10 millones de estos animales, después de descubrir que eran portadores de una mutación del nuevo coronavirus . Sin embargo, en los últimos días surgió un nuevo problema: al menos un centenar de visión se escaparon de una granja donde eran monitoreados.
Según explicaron los especialistas, los visones que se fugaron podrían infectar a otros animales (en especial, hurones y mapaches), lo que genera temores de un reservorio de Sars-CoV-2 desde el cual se podrían reintroducir nuevas variantes del virus en los humanos.
"Cada año, algunas millas de visones escapan. Lo sabemos porque son una especie invasora y cada año los cazadores y tramperos matan unos miles de visones salvajes. La población de visones escapados es bastante estable", le contó a The Guardian Sten Mortensen, gerente de investigación veterinaria de la Administración de Alimentos y Veterinaria de Dinamarca.
Sin embargo, este año, added Mortensen, existe el riesgo de que alrededor del 5 por ciento de los visones que escaparon de las granjas estén infectados con covid-19.
Por su parte, la dirección de virología de la Universidad Erasmus de Rotterdam, Marion Koopmans, advirtió que el virus podría "continuar evolucionando en sus huéspedes animales, lo que constituye una amenaza pandémica permanente para humanos y animale s".
Actualmente, en EE.UU. se están desarrollando vacunas contra el coronavirus para visones, aunque para las organizaciones de bienestar animal este tema es polémico.
Hasta la fecha alrededor de 10 millones de visones han sido sacrificados. Según la ONU, la cepa mutada podría implicar una reducción de la efectividad de las vacunas.