Una adolescente del colegio Sagrado Corazón de Castelar, Buenos Aires, viajó a Bariloche con síntomas de coronavirus, a pesar de haber presentado una declaración jurada donde afirmaba encontrarse bien de salud y, una vez en Río Negro contagió a 65 compañeros, quienes vieron afectado su viaje de egresados.

El hecho se produjo durante Semana Santa, cuando todavía estaban permitidos los viajes en grupo, antes de los anuncios del presidente Alberto Fernández.

En ese entonces, las medidas impuestas para los viajes de egresados consistían en una semana de aislamiento previa, la firma de la declaración jurada y una prueba PCR negativo realizada 72 horas antes.

“Se realizó el PCR (que dio negativo) el lunes, dos días antes de lo que exigía la empresa“, sostuvo una de las compañeras sobre la joven que viajó con dolor de garganta y la fiebre, lo que ocultó con medicamentos.

Luego de tres días en Bariloche, donde la adolescente asistió a excursiones y boliches, sus compañeros comenzaron a presentar fiebre, cansancio, pérdida del olfato y gusto.

Por lo que la empresa a cargo implementó el protocolo estipulado y realizó una burbuja de 300 personas en el hotel y los alumnos que presentaron síntomas fueron aislados de a cinco en sus habitaciones durante 10 días, mientras que, quienes dieron negativo regresaron en avión a Buenos Aires.