El segundo semestre no llegó y los números lo demuestran: por primera vez en 12 años, el 80% de los argentinos redujeron sus consumos y "achicaron el changuito". Esto implicó que se resignaron primeras marcas y cantidades compradas.
Según la consultora Kantar World Panel, el consumo cayó en 2016 un 4%, un guarismo en sintonía con el que difundió CCR, que estimó una merma del 4,7% para el año pasado. El final de año no fue mejor: entre octubre y diciembre, se consumió un 6% menos que en los mismos meses de 2015.
El relevamiento advirtió que los consumidores resignaron cantidades y marcas. Bebidas fue el segmento de mayor reducción, pero siete de cada diez categorías perdieron volumen, entre ellas leches cultivadas, leches líquidas y postres para niños. Solo las sopas y pastas lograron crecer en cantidades interanuales.
En cuanto a los más afectados, los sectores medios y bajos son los que más se contrajeron. Solo los sectores medios-altos y altos pudieron mantener su nivel de vida entre 2015 y 2016.