Los “cambios” en el transporte urbano interprovincial conocido comúnmente como el “Chaco Corrientes”, que viene con deficiencias de décadas, al mejor estilo de la crisis energética correntina, deberán esperar al mes de abril, cuando recién se aplicarían las “mejoras” en el servicio de transporte interprovincial. Mientras tanto habrá que viajar como ganado, un tiempo más. Viajar hasta el Chaco o volver a Corrientes, encima con estos calores, es muy crítico, por la falta de colectivos.
En época de clases por los miles de alumnos y en vacaciones, por los centenares de bañistas. Durante todo el año el servicio del transporte público interprovincial se mantiene colapsado y la prestación está plagada de falencias.
Las mejoras llegarían recién en el segundo trimestre del año, cuando se avance con la licitación.
En la costanera de Corrientes en el puerto todas las noches se forma una larga fila de pasajeros que esperan abordar una unidad para regresar al Chaco, luego de haber permanecido en la playa todo el día; situación que se agrava los fines de semana cuando la afluencia es mucho mayor. Habrá que seguir esperando, haciéndose de mucha paciencia en todo sentido.
El subsecretario de Transporte de Chaco, Roberto Medina, confirmó que “en abril recién estarían funcionando las nuevas unidades Chaco-Corrientes”.
Tras la publicación del pliego de condiciones generales del servicio, realizada en el Boletín Oficial a fines de diciembre, esperan que se avance con las condiciones particulares para que las empresas interesadas alisten sus ofertas.
"Se le pide a las empresas que cumplan con ciertos requisitos económicos financieros, con el objetivo que esté garantizado el parque automotor, cómo el mantenimiento del servicio a lo largo de la concesión, la cual será por diez años", detalló el funcionario chaqueño.
El pliego incluiría mejoras y modernización del servicio, más la implementación de la Tarjeta Sube y tarifas diferenciales. Definiciones que se deben dar para compatibilizar todo el esquema con el sistema de transporte urbano de la capital correntina y la ciudad de Resistencia. “Ambas empresas tendrán implementado el sistema (SUBE), para unificar la forma de pago”, adelantó Medina.
Las mejoras deberían pasar por el acondicionamiento de los vehículos, incorporación de nuevas unidades, una tardanza de 15 minutos como máximo en horario pico y paradas adaptadas, entre otras.
Con estos pasos administrativos aguardan que en los próximos meses el servicio funcione con la o las empresas adjudicadas.