Pobladores esperaron por tres semanas agua apta para consumo humano llevada en un camión cisterna. Sobrevivieron bebiendo agua de lluvia. Denuncian abandono de autoridades comunales y provinciales.
Como si se tratara de una película distópica, pobladores del Paraje la Soledad, e Isla Sola –cercanos a Goya- recibieron en medio de festejos un camión cisterna con agua potable.
Esperaron por esa asistencia por más de 20 días y mientras, tuvieron que consumir agua de lluvia que juntaron con las pocas precipitaciones de la zona.
Denuncian abandono por parte de las autoridades comunales y de la provincia al no tener siquiera, un pozo de extracción. Algo que tampoco es recomendable para extraer líquido que sea apto para el consumo humano.