Un nuevo dato sobre la desaparición de Loan ha surgido a partir de las declaraciones de un testigo de solo seis años que estuvo con el pequeño antes de su desaparición.
«El nene murió, el nene murió», repitió el testigo en cámara Gesell, lo que ha generado un análisis detallado por parte de los investigadores para determinar si lo que dijo fue algo que vio o si reprodujo una frase que escuchó o le contaron.
La desaparición de Loan ocurrió el 13 de junio pasado, después de almorzar en la casa de su abuela paterna en la zona rural de 9 de Julio. Loan y otros cinco niños fueron a buscar frutas a un naranjal acompañados por tres adultos: Bernardino Antonio Benítez, Daniel Ramírez (conocido como Fierrito) y su pareja, Mónica del Carmen Millapi, quienes están detenidos por sustracción y ocultamiento.
Las declaraciones de los menores en cámara Gesell han sido extensas, pero los investigadores están evaluando si sus palabras son producto de lo que vivenciaron o de lo que escucharon durante este tiempo. La jueza federal de Goya, Cristina Pozzer Penzo, el fiscal federal Mariano de Guzman y representantes de la Procuraduría de Trata y Explotación de Personas (Protex) presenciaron las declaraciones.
«El primo de Loan dijo ‘el nene murió’ y que ‘al chico lo escondieron’. Lo dijo dos o tres veces, como jugando, cuando articulaba con papel y lápiz y otros elementos que le dieron para que pudiera explayarse. Quizá lo ideal será que vuelva a declarar para saber por qué lo dijo«, explicaron las fuentes citadas por La Nación.
Otro detalle relevante es que uno de los menores habló de «un encapuchado» que estuvo en la zona cuando desapareció Loan, y sostuvo que ese desconocido tenía un tatuaje. Sin embargo, no hay otras evidencias o pruebas sobre el encapuchado en la zona cero, y solo una persona mencionó esto.
«De las declaraciones de los menores hubo algo en que todos coincidieron: que una vez que llegaron a lo que se conoce como ‘el naranjal’, los niños estuvieron por un lado, y las niñas estuvieron por otro», afirmó una fuente al tanto de los testimonios.
Los fiscales a cargo de la Protex analizarán cada una de las declaraciones para intentar «sacar algo en limpio» que sea de utilidad para la investigación. Hasta ahora, el misterio sigue latente 54 días después de la desaparición de Loan.