El cadáver que fue hallado en la vivienda de la madre de un prófugo es el de la joven de 22 años que había desaparecido el 1 de abril en esa zona. Hay seis detenidos. La identificaron por uno de los tatuajes.



Araceli Fulles la joven desaparecida el pasado 1 de abril, fue hallada sin vida en la tarde del jueves en la localidad bonaerense de José León Suárez, partido de San Martín, en la casa de la madre de uno de los principales sospechosos de su muerte. La identificaron por uno de sus tatuajes.



La causa ya tiene seis detenidos y un prófugo, identificado como Darío Gastón Badaracco.

Personal de Infantería de la Policía Bonaerense y de la Policía Local custodiaban la vivienda donde se halló el cuerpo, mientras se esperaba una confirmación oficial sobre la identidad de la mujer que apareció asesinada.



Fuentes policiales indicaron que el hallazgo se produjo entre las calles Alfonsina Storni y 9 de Julio, en el terreno de una casa donde vivía Badaracco, sospechoso por la desaparición y asesinato de la chica, según indicó la familia de Araceli.



De acuerdo a las primeras informaciones, fueron hallados restos humanos tapados con cal y escombros en ese lugar.



Luego de un allanamiento en ese lugar, los perros de la fuerza provincial marcaron el terreno y así se pudo dar con el macabro hallazgo.



En tanto, el padre de la joven, Ricardo Fulles, sostuvo en declaraciones televisivas que el lugar es la casa de un sospechoso por la desaparición de su hija, ya que había sido el último que la vio antes de que se perdiera todo rastro de ella en Villa Ballester.

 

"La fiscal le tomó declaración a este tipo, siendo el principal sospechoso y después lo dejó que se fuera a tomar mate a su casa", remarcó en referencia a la fiscal Graciela López Pereyra.



Badaracco, de 29 años y con antecedentes penales por robo a mano armada y otra por encubrimiento, habría sido el último que vio a Araceli y permanecía prófugo este jueves por la noche.



Por el hecho resultaron detenidos, acusados de "homicidio agravado", Jonathan Avalos, de 29 años, Marcos Antonio Ibarra, de 32, Emanuel Avalos, de 25, y Carlos Cassalz, todos de nacionalidad argentina y con domicilio en José León Suárez, a excepción de, primero de ellos que vive en Villa Progreso, pero también en San Martín.

 

Estos apresados están sospechados de homicidio agravado, mientras que hay otros dos apresados por "encubrimiento", Hugo Cabanas, de 46 años, y Marcelo Ezequiel Escobedo, de 37.

El lugar donde hallaron el cuerpo ya había sido allanado por la Policía Bonaerense, pero no habían llevado los perros rastreadores, cosa que sí hicieron en esta ocasión. Según las fuentes, "el cadáver estaba cubierto por cal y escombros y, a su vez, todo disimulado con una capa de cemento reciente", precisaron las fuentes.



Asimismo, a unas diez cuadras de donde fuera encontrado el cadáver, los familiares de Araceli, amigos y vecinos realizaban desde las 18:00 una marcha para pedir por la aparición con vida de la chica. El cuerpo fue hallado en la casa de Badaracco con quien Araceli se vio la noche que despareció y en cuyo camión hallaron pelos de la chica desaparecida, según comprobó la Policía Científica Bonaerense.