Casi clandestinamente, sin publicación de convocatoria ni orden del día una juntada de dirigentes del justicialismo se produjo el lunes por la noche en la sede del Sindicato telefónico. Desde el PJ se dijo que la invitación fue cerrada, via whatsApp, una extraña metodología que, aunque acorde a los tiempos modernos, muestra el poco apego por las formas de la actual conducción, alineada a los K.

 

Aún con defectos formales el Consejo sesionó en minoría, con uno menos del reglamentario, y como se esperaba, en la mira estuvo el voto de Camau Espinola en el Senado por el tema tarifas.

 

Del tema fecha de elecciones internas que es el que genera expectativas no se habló. En total, los presentes no llegaron a 50 contados algunos militantes.  Solo un Intendente, el de San Luis, y pocos legisladores.

 

Una juntada fue el termino que utilizó el Profesor Gerardo Bassi para la cuanto menos curiosa invitación a una reunión que pretendió ser expresión de la orgánica justicialista.

 

El mensaje, de limitada difusión, agrego el carácter de urgente. La convocatoria fue pobre. No hubo quórum y extraño que los Intendentes peronistas que concurrieron a la audiencia con el Gobernador prefirieron no acercarse al Sindicato donde costó más de una hora llegar a los 12 consejeros que se sentaron ea la mesa, sin lograr quórum.

 

En la mira, el voto de Camau, que en los últimos días, había sido noticia nacional por no acompañar el despacho del Bloque del PJ en el tema tarifas.

 

Una baja que debilito la posición de Miguel Pichetto aunque, ya para el viernes último, el Presidente de la Bancada había conseguido que el senador por Corrientes vuelva a alinearse.

 

Aún así la juntada apuntaba a instruir a los senadores nacionales para el voto contra el tarifazo, una instrucción de dudosa legalidad por cuanto la convocatoria fue defectuosa y no hubo orden del día siquiera en los mensajes de por internet qué muchos consejeros no tomaron en cuenta. Y de hecho carente de legitimidad por la falta de representación que mostró el pretendido cónclave partidario donde una vez más el consabido documento que acompaña las reuniones de la cúpula peronista.

 

En el medio la recurrente critica a la decisión de ir al FMI y a la intervención del PJ nacional, siempre dentro de un libreto de

 

Claro sello kirchnerista que según uno de los presentes había surgido de un encuentro del que participó el Profesor Bassi en el Instituto Patria días atrás.

 

Otro de los temas que sobrevoló fue el contundente apoyo dado por Camau al parque nacional del Ibera, en abierto contraposición con lo sostenido por su alter ego el diputado Martin Barrionuevo en la Cámara de Diputados y quizás como devolución de favores a las críticas que le propino el ex Intendente Cemborain que también ayer brillo por su ausencia.

 

Aún así lo que pareció quedar claro es que el justicialismo sigue sin rumbo, con posiciones panfletarias, y encerrado hacia adentro con nula participación de la militancia que desde hace tiempo reclama que hayan internas, un pedido que la conducción desoye.

 

Tanto la posibilidad de internas como de un Congreso partidario es algo que asusta a la cúpula del PJ.-