Si los organismos de seguridad locales aprueban la propuesta, "Xeneizes" y "Millonarios" se verán las caras en el estadio del Real Madrid el domingo 9 de diciembre desde las 16.30 (hora argentina).
Después de las idas y vueltas entre la Conmebol y los representantes del fútbol argentino, el acuerdo está a un paso. Todo indica que será en España: el estadio Santiago Bernabéu fue aprobado para albergar la Superfinal entre los River y Boca. Sólo falta el OK de la Policía de Madrid para que la confirmación sea completa.
La precaución va de la mano de un antecedente cercano: en las últimas horas también había acuerdo para que el Superclásico se disputara en Miami, sin embargo, las fuerzas de seguridad locales no dieron su aprobación y la posibilidad se cayó.
Tras la negativa de jugarse en Argentina porque "no estaban dadas las condiciones, según las palabras de Alejandro Domínguez, titular de la Conmebol, y de que se fueran descartando escenarios como Asunción, Miami o Doha, la Real Federación de Fútbol de España y el Real Madrid dieron el visto bueno para albergar tamaño encuentro.
La predisposición es total: Pedro Sánchez Castejón, presidente del gobierno español, publicó en su cuenta de Twitter que "España está dispuesta a organizar la final de la Copa Libertadores entre el Boca Juniors y el River Plate. Las FCSE y los servicios implicados, con amplia experiencia en dispositivos de este tipo, trabajan ya en el despliegue necesario para garantizar la seguridad del evento". Lo hizo desde el avión que lo trasladaba a Buenos Aires para la cumbre del G20.
De ultimarse los últimos detalles, el enfrentamiento entre los equipos de Guillermo Barros Schelotto y Marcelo Gallardo se jugará a partir de las 20:30 horas local, 16:30 en Buenos Aires, con árbitro a definir, pero que podría ser español.
El calendario juega a favor de los poderosos de Europa ya que el Barcelona visitará al Espanyol el sábado 8, mientras que los de Santiago Solari viajarán a Huesca el día después.
Los dos clubes no sólo están al tanto de la sede, sino que además ya actuaron en consecuencia. Boca reservó 40 plazas en el hotel Euro Stars y solicitó autorización para entrenarse en el complejo Las Rozas de la Federación Española. Viajaría el lunes. River, en tanto, se hospedaría en el hotel donde suele haber base Barcelona cuando le toca jugar en Madrid. Y negocia para trabajar en el predio del Merengue en Valdebas.
EL ESCÁNDALO DEL DÍA PAUTADO Y LA REUNIÓN POSTERIOR
El partido de vuelta de la final de la Copa Libertadores estaba pautado para el sábado 24 de noviembre en el Monumental. Allí el Millonario y sus fanáticos iban a recibir al equipo xeneize después del 2-2 que definió el encuentro de ida.
Las agresiones que recibió el micro del cuadro visitante obligaron a la postergación del inicio del partido, pautado para las cinco de la tarde. A medida que se descubrían las lesiones de los jugadores de Boca Juniors, los problemas iban en aumento y el horario se fue dilatando, a tal punto que terminó por pasarse al día siguiente.
Dos horas antes de la nueva fecha programada volvió a suspenderse el duelo y la Conmebol propuso una reunión para el martes 27, en la que se resolvió que el Superclásico se mudara fronteras afuera de Argentina, a la espera de la definición de la Unidad Disciplinaria.