Los compañeros sean unidos, porque esa es la ley primera; tengan unión verdadera en cualquier tiempo que sea, porque si entre ellos pelean los devoran los radicales de afuera. Una especie de Martín Fierro del subdesarrollo contemporáneo que bien podría aplicarse a la actualidad política provincial. En tanto otros partidos o alianzas recién arrancan su maquinaria política para el año electoral 2017 que promete ser bastante caliente, Ricardo Colombi pone primera en su carpeta y anota nombres para su sucesión. Aunque sería uno sólo. “Él” hombre que estará en primera línea. Hasta algunos afiches le han confeccionado.



Con nombre, apodo y apellido: Bernardo Eugenio “El Gringo” Rodríguez. Sería ungido como el candidato sucesor de Horacio Ricardo Colombi.



Así llegaría a la gloria institucional en la provincia, después de desarrollar una larga cadena de merecimientos. Como haber sido secretario privado del gobernador, en los primeros años de mandato, por ende un hombre de absoluta confianza de Ricardo. Hermano de Graciela Rodríguez, integrante de la cofradía exclusiva cercana al despacho oficial de gobernación y, en todo momento, una de las espadas legislativas del Ejecutivo en la Legislatura; subsecretaria general y apoderada del partido radical.



Los hermanos Rodríguez son oriundos de Curuzú Cuatiá, una localidad muy cercana al pueblo del gobernador y desde allí supieron granjearse la confianza del popular ‘Lalaca’.



Bernardo es interventor del Instituto de Vivienda de Corrientes, donde pasa largas horas de encierro, según apuntan, también administrando los intereses del mandamás de la provincia, como testaferro. Aunque siempre apegado a la figura de un hombre de perfil bajo, aguantando tranquilamente los castigos constantes desde el arco sindical, encabezados por el locuaz sindicalista Juan Arnedo y compañía.



De esta manera Rodríguez alcanzaría el máximo premio al cual puede aspirar todo hombre de la política, especialmente él por ser un ricardista de la primerísima hora.



La bomba de ensayo está largada. Seguramente será un plato difícil de digerir para hombres de paladar negro dentro de la alianza ECO. “En las mediciones, hoy no será un Canteros, no será un Cassani, pero el Gringo con todo el aparato propagandístico del gobierno, podría cobrar notoriedad electoral en poco tiempo”, justificó un amigo de la política hacia CorrientesHoy.com.



El cierre sería justo. Con Ricardo Colombi como senador, según la hipotética chance que se baraja y con el Gringo sentado en el Sillón de Ferré; el círculo de poder le cerraría perfecto al actual gobernador, quien seguiría manejando desde el Legislativo, los principales hilos de la provincia.