Monseñor Adolfo Canecin, obispo de la Diócesis de Goya, presidió el martes una misa en la Catedral “Nuestra Señora del Rosario”, en el Día Internacional contra la Trata de Personas, cuyo tema para este año es: "Que ningún niño se quede atrás en la lucha contra la trata de personas". El prelado dijo nos “unimos a las marchas que se están realizando en Goya, pidiendo por Loan, por su vida, su salud y sus padres que se llaman María y José” dijo.



El Día Mundial contra la Trata de Personas, es una jornada que se conmemora todos los 30 de julio desde 2014, habiendo sido establecida esa fecha en 2013 por la Asamblea General de las Naciones Unidas.



El obispo Adolfo Canecin, centró su homilía en la desaparición de Loan, señalando “dice la Biblia, no hay nada oculto que no pueda salir a la luz; siempre y cuando, dos o más se pongan de acuerdo y pidan algo a mi Padre” por eso “nosotros, lo mejor que podemos hacer es rezar en serio por esta intención”.



El Papa Francisco, dijo que la Trata de Personas “es una verdadera y gran plaga para la humanidad este flagelo y no estamos nosotros exentos de esta realidad”, señalo el Obispo Adolfo Canecin.



“Cada ser humano vale para Dios más que el universo entero, es precioso a los ojos de Dios, por eso, la Trata de Personas es un flagelo, es una plaga, porque atenta contra el plan y proyecto de Dios, que creo al ser humano para que tenga vida y vida en abundancia” dijo el obispo.



Animo a “discernir acerca del sentido de la vida” y afirmó “pensemos en los padres de Loan. Dios no quiere lo que le ha pasado a esta familia y tantas otras familias que a lo mejor no trascendió como este caso”.



Planteó “El corazón del ser humano, creado a imagen y semejanza de Dios ́´salió bueno´dice la Biblia, pero el pecado irrumpe y entra en la historia por instigación del enemigo y por el mal uso de la libertad de Adán y Eva. El pecado llega y anida en el corazón del ser humano”.



“La vida es un don y una gracia, es un regalo de Dios y, Él es autor, origen y fuente de la vida. El dueño de la vida es Dios. Nuestro Dios nos pensó desde la eternidad y nos amó con amor eterno y cada ser humano es único e irrepetible” puntualizó.



Más adelante hizo propias las palabras del Papa Francisco señalando “la Trata de Personas es una plaga y es un flagelo que atenta contra el proyecto de Dios. Nuestro Dios creó al ser humano para que tenga vida y vida en abundancia. Dios no quiere la destrucción, no quiere la esclavitud, no quiere que el ser humano sea reducido a un mero objeto de placer o cualquier tipo de uso” planteo.



“Como valoramos la vida como don y regalo de parte de Dios para con nosotros, por eso, estamos en contra de todo lo que atenta contra la vida, como son las adicciones y la droga dependencia, la Trata de Personas, por eso, estamos rezando intensamente desde el 13 de junio pasado por Loan” afirmo.



Agregó “Dios no quiere esto que le ha pasado a este niño. Dios no quiere esto que ha pasado a María y a José (los padres de Loan), Dios no quiere lo que le ha pasado a esta familia y a tantas otras familias que a lo mejor no trascendió como el caso de Loan”.



“¿Por qué ocurre eso? –pregunto y respondió- porque el corazón humano se enferma por el ansia de poder, de placer, por el ansia de dinero y esa es la verdadera cizaña” dijo haciendo referencia a la parábola del trigo y la cizaña proclamada en el evangelio de este día.



“El corazón humano a veces es capaz de actuar demoniacamente y atentar contra la propia vida y de atentar contra la vida inocente de los seres humanos. Dios esto no quiere, es una ´verdadera plaga´ por eso, primero tenemos que dar gracias y pidamos la sabiduría para discernir acerca del sentido de la vida” añadió.



Alentó a los fieles a “orar mucho para que nuestro corazón no se contamine con el mal y que si está contaminado se convierta para entrar en el bien, para tener ´la buena semilla’ pensar, sentir y decir siempre el bien y si algún momento se quiere filtrar la cizaña, tengamos la capacidad de discernir diciendo esto no es de Dios”.



“La Trata de Personas es un terrible delito que se aprovecha de la vulnerabilidad de las personas y de la condición de desigualdad en la que se encuentran especialmente las mujeres, los niños y toda persona vulnerable” asevero monseñor Canecin.



Parafraseando al Papa Francisco dijo “La Trata y tráfico de personas es una actividad que no respeta y no mira a nadie a la cara, garantizando grandes beneficios económicos a personas sin escrúpulos morales”.



Sobre el caso del niño desaparecido Loan dijo “no podemos mirar para otro lado, todos tenemos que involucrarnos” y reiteró su llamado a “trabajar articuladamente todas las instituciones".



"Tenemos que crear redes para el cuidado de los niños, las niñas, adolescentes y personas vulnerables. Hay flagelos que son muy grandes, que tienen mucho poder económico y mucho poder ideológico detrás, entonces, para combatir estos flagelos tenemos que hacer una lucha organizada” concluyó.--