Pese al sistema de bombeo que tiene la ciudad de Goya, para ayudar a escurrir las aguas pluviales, 90 familias debieron abandonar sus hogares en los últimos días por la repentina inundación.



Estos núcleos familiares se encuentran alojados en los centros dispuestos por el Municipio, donde reciben la atención necesaria, indicaron desde la administración comunal.



Mientras, el Gobierno Provincial colabora con varias máquinas retroexcavadoras para ayudar a escurrir las aguas en los barrios más afectados por las copiosas lluvias. A ellas se sumará este viernes una bomba.



En esa línea, en los barrios Chacales y Santa Clara, ayer se advirtió un aumento en los niveles del agua proveniente de la zona Este de Carolina.



La zona de Rincón de Gómez recibe el flujo de agua desde Carolina, que escurre hacia el barrio Santa Clara a través de alcantarillas de la ruta provincial 38 (el viejo camino a Santa Lucía).



Todas las alcantarillas del lugar son superadas por el volumen de agua e incluso en algunos sectores cruza sobre el camino.



En el asentamiento Chacales, se trabaja con una oruga y otra máquina en el canal circunvalación, además de una bomba de 60 kw.



También en este la laguna Bosco se continúa bombeando, y se observa que los volúmenes de agua bajan.