Una mujer residente en Santo Tomé denunció que en la estancia perteneciente a sus hijos y su exmarido, ubicada en Estación Torrent, se faenan clandestinamente animales, incluso ganado ajeno que pasta en esos campos, sin ningún tipo de control sanitario y con el aval de los efectivos policiales. En la causa quedaron imputados su expareja y dos miembros del Priar de la localidad de Alvear. La denunciante fue citada a declarar recién en el mes de marzo del próximo año.

En diálogo con El Litoral, Marcela Bond indicó que los hechos se vienen registrando desde hace bastante tiempo atrás en la estancia La Blanca, que está ubicada en Estación Torrent en el departamento de Alvear y que pertenece a su exmarido y a sus hijos. Además de animales propios, en el lugar realizan pastaje vacunos pertenecientes a otros productores, que son supuestamente faenados por los mismos peones sin que estos lo sepan.

Al respecto explicó que en reiteradas oportunidades realizó denuncias y que efectivos del Priar concurrieron a la estancia para corroborar sus dichos, no obstante en el lugar “se pusieron a charlar con los peones e incluso se llevaron carne”, sostuvo. Estos últimos hechos aparecen mencionados en su denuncia ante la fiscalía de Instrucción de Santo Tomé.

La causa

La denuncia realizada por Bond por “supuesto abigeato” fue radicada el 21 de septiembre pasado en la Fiscalía de Instrucción y Correccional de Santo Tomé, a cargo del doctor Facundo Cabral. En el expediente la mujer indica que en la Estancia La Blanca “se vienen faenando animales vacunos sin autorización de los propietarios de los mismos, esto es personal de la estancia junto con funcionarios de la Policía y su exesposo”. En este sentido agrega en su declaración que el 8 de marzo encontró en el lugar “cueros de oveja (siendo que en la estancia La Blanca no hay ovejas)” y cueros de animales vacunos. Por esta razón la mujer solicitó la presencia de los efectivos del Priar de Alvear quienes al concurrir al lugar se entrevistaron con su exmarido y no con ella, ya que los uniformados “fueron a almorzar con el personal de la estancia y su exesposo”.