El país caribeño fue ubicado en ese registro, bajo la presidencia de Ronald Reagan, en el año 1982 hasta que fuera retirado del mismo por el presidente estadounidense Barack Obama en 2015. Su reingreso se dio en enero de 2021 bajo el mandato de Donald Trump.

Estados Unidos decidió excluir a Cuba de la lista de Estados que patrocinan el terrorismo desde su punto de vista y los países miembros de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América-Tratado de Comercio de los Pueblos (ALBA-TCP) aplaudieron la medida.

«Estados Unidos mantiene como objetivo central de su política la necesidad de lograr más libertad y democracia, un mayor respeto por los derechos humanos y una mayor libertad de empresa en Cuba. Para alcanzar estos objetivos será necesario un compromiso práctico con Cuba y el pueblo cubano que vaya más allá de lo que se describe en el Memorando presidencial de seguridad nacional (NSPM-5) y que tenga en cuenta los recientes acontecimientos en Cuba y el cambiante contexto regional y mundial», señala el documento del país norteamericano.

El país caribeño había sido integrado a ese listado en 1982, durante la presidencia de Ronald Reagan, hasta que en 2015 fue ordenada su exclusión al no existir un mecanismo de revisión periódica.

Otra vez, en los inicios de enero de 2021, antes de la salida del Gobierno estadounidense de Donald Trump, la Casa Blanca reincorporó otra vez a Cuba al status de “Estado terrorista”.

A partir de la exclusión actual el ALBA-TCP calificó esta acción como un paso positivo y alineado con las demandas históricas de Cuba y de diversos actores internacionales.

Aunque limitada, esta medida también incluye la eliminación de otras dos sanciones unilaterales, lo que supone un avance hacia el respeto de la soberanía cubana y su derecho al desarrollo.

Mediante un comunicado oficial fechado este miércoles en Caracas, la organización latinoamericana destacó que la inclusión de Cuba en esa lista fue siempre arbitraria y políticamente motivada, utilizada como un mecanismo adicional para intensificar el bloqueo económico ilegal contra la nación caribeña.

Además, el texto enfatiza el compromiso probado de la Revolución Cubana en la lucha contra el terrorismo en todas sus formas.

Los Estados que conforman al ALBA-TCP «esperan que este sea el primer paso para el levantamiento total de la política genocida e ilegal de guerra económica contra Cuba que ha provocado por más de seis décadas de sufrimiento y dolor injustificados al pueblo cubano».

Por último, la Alianza ratifica su apoyo irrevocable a Cuba en su derecho a transitar un camino soberano hacia el desarrollo, libre de medidas coercitivas que violan el derecho internacional.

La plataforma de integración regional está conformada por Venezuela, Cuba, Bolivia, Nicaragua, Dominica, Granada, Santa Lucía, Antigua y Barbuda; San Vicente y las Granadinas, y San Cristóbal y Nieves.