La Asociación Gremial de Trabajadores del Subte y Premetro (Metrodelegados) convocó a un paro total del servicio para el próximo miércoles 20 de noviembre, tras la muerte de un trabajador que estuvo expuesto al asbesto, un material cancerígeno que está presente en algunos vagones de la Ciudad de Buenos Aires.
El gremio emitió un comunicado en el que detalló que las medidas consistirán en la paralización escalonada de las líneas de subte y Premetro. El cese de actividades comenzará con las líneas A y B, que se detendrán de 10 a 12. Luego, de 12 a 14, será el turno de las líneas D y H. Finalmente, de 14 a 16 se verán afectadas las líneas C, E y el Premetro.
El empleado que falleció el pasado miércoles 13 de noviembre se llamaba Jorge Navarro, tenía 65 años y trabajaba en el Taller Constitución. En el 2020, a través de una auditoría médica, el hombre comprobó que padecía cáncer de pulmón producto de la exposición a este mineral cancerígeno.
La organización gremial detalló que Navarro fue el cuarto trabajador fallecido a causa del asbesto. Además, precisaron que actualmente hay cinco empleados enfermos de cáncer y 2.179 personas están bajo vigilancia médica.
“Desde el 2018, cuando descubrimos la presencia del material cancerígeno prohibido, en el subte y Premetro han fallecido cuatro empleados y 107 están afectados por la exposición al asbesto. Todos los casos son reconocidos por la Superintendencia de Riesgos del Trabajo”, añadieron.
“Desde la Asociación Gremial de Trabajadores del Subterráneo y Premetro (Agtsyp) seguimos peleando para que saquen todo el asbesto instalado en la Red, y para que el Gobierno de la Ciudad compre flotas nuevas libres de este cancerígeno, que sigue enfermando y matando a nuestros compañeros”, expresaron.
Por otra parte, declararon: “Con esta medida queremos expresar claramente que la muerte de nuestro compañero Jorge Navarro se trató de un asesinato, cuyos responsables son la empresa concesionaria Emova y el Gobierno de la Ciudad que contamina y enferma con un mineral prohibido a trabajadores, usuarios y vecinos de la red”.
“Exigimos el retiro inmediato del asbesto de toda la red, el cambio de las flotas contaminadas, la declaración de emergencia para la línea B y el ingreso al Relevamiento de Agentes de Riesgo (RAR) de todos los trabajadores”, agregaron.
El gremio recordó que el asbesto está prohibido en Argentina desde el 2003, pero alertaron: “A pesar de ello, durante muchos años trabajamos sin ser informados de la presencia de asbesto en nuestro ámbito laboral. Las autoridades lo negaron hasta que nuestro sindicato demostró que los trenes CAG 5000 contenían ese mineral cancerígeno usado como aislante”.
Finalmente, aseguraron que continuarán con este tipo de medidas de fuerza hasta obtener las respuestas que les garanticen condiciones óptimas de salubridad, tanto para ellos como para los usuarios.